CARACAS, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, alertó este domingo a la población de la posibilidad de que se produzca un nuevo golpe de Estado contra su Gobierno y advirtió a sus opositores de que cuenta con el arsenal militar necesario para contenerlo.
Con motivo de las celebraciones del octavo aniversario del intento de golpe de Estado contra Chávez el 11 de abril de 2002, el mandatario venezolano indicó que si sus opositores "llegaran a inventar otra cosa" habría que "radicalizar al extremo la revolución" socialista que ha liderado.
El dirigente venezolano subrayó la importancia de contar con la capacidad armamentística necesaria para disuadir al enemigo de posibles ataques y frenar un eventual golpe contra su Ejecutivo e instó a la población a prepararse para actuaciones de este tipo. "Soldado, pueblo prepárense para eso", aseveró.
"Si llegaran a inventar un golpe de Estado, un acto terrorista, de gente experta, de alguna parte muy lejana del mundo, expertos en carros bombas, tenemos que estar preparados porque la respuesta tiene que ser radical", dijo Chávez durante su alocución de este domingo.
En este sentido, el dirigente aseguró que "la única manera de impedir la guerra o que nos invadan es preparándonos" y rechazó las críticos de los sectores que le acusan de armamentista indicando que la única forma de frenar estos ataques es la prevención. "El pueblo está en armas. Tendremos fusiles para todo el pueblo", señaló.
En concreto, el presidente señaló a la burguesía del país, a la que acusó de intentar derrocarle en 2002 por no entregarse "al imperio yanqui". Chávez aseguró que este sector de la población prepara un nuevo levantamiento contra su administración.
"La burguesía sigue ahí, llamando al golpe. Conspirando para matarme, siguen conspirando para sabotear", señaló el mandatario al tiempo que mandó un mensaje a sus competidores asegurando que "la batalla no ha terminado".
Además, Chávez informó de que hace días los servicios de Inteligencia del país habían neutralizado un "plan conspirativo" con el que pretendían bombardear el escenario de su programa dominical 'Aló Presidente'.
CRÍTICAS A LA IGLESIA
En relación con el octavo aniversario del intento de golpe de Estado contra su Gobierno, el presidente venezolano criticó la actuación de la Iglesia Católica del país en esos momentos que apoyó abiertamente el levantamiento.
"Ellos apoyaron el golpe, pero para nada se han pronunciado con el tema de los curas pedófilos, para ellos eso no ha pasado", apuntó Chávez en referencia a las denuncias por abusos de menores que han salido a la luz pública en el último mes y que habrían sido cometidas por sacerdotes católicos.
Asimismo, el mandatario recordó el comportamiento del cardenal Velasco, quien acudió a entrevistarse con Chávez para que firmara la renuncia, y señaló que la actual cúpula eclesiástica en Venezuela "hace imposible cualquier tipo de reconciliación".
"La batalla sigue, ellos siguen, esa cúpula de la Iglesia ni recapacita ni nada. Con ellos no hay reconciliación porque su actitud hace imposible cualquier acuerdo, cualquier esfuerzo", concluyó el dirigente socialista.