CARACAS, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
La negociaciones entre los representantes del Gobierno venezolano y los familiares de los presos fracasaron después de que los mediadores evangélicos no lograran convencer a las autoridades para permitir el ingreso de agua y comida a El Rodeo II, con lo que se dilata aún más la crisis que comenzó hace más de tres semanas en esa prisión del estado de Miranda (centro-norte).
Los cerca de 1.300 reos que desde hace unos 20 días se mantienen atrincherados en El Rodeo II --a unos 30 kilómetros de Caracas-- se niegan a deponer las armas y denuncian que continúan siendo blanco de continuos ataques con gases lacrimógenos por parte de efectivos la Guardia Nacional Bolivariana.
La crisis en El Rodeo I y II comenzó el pasado 12 de junio cuando se produjo un motín entre las mafias durante la visita familiar. La situación empeoró cuando un grupo de líderes --también llamado "pranes"-- tomó el control del segundo anexo de esa prisión y secuestró a un millar de reos, según la versión de las autoridades venezolanas.
Los "pranes" se encuentran atrincherados en una zona de El Rodeo II que se conoce como "la torre" desde el pasado 17 de junio. La intervención hace tres semanas de unos 5.000 uniformados no pudo reducir a este grupo de reclusos que tendrían en su poder armas de guerra mucho más poderosas que las que portan los oficiales de la Guardia Nacional Bolivariana, según informaciones divulgadas por medios locales.
Las instalaciones de El Rodeo I --donde quedan unos 800 reos-- se encuentran militarizadas desde la intervención, pero El Rodeo II todavía está en poder de los líderes de las mafias identificados como 'Yoifre' y 'Oriente'. Sus condiciones son claras: retirar a los uniformados del penal y permitir el ingreso de agua y comida, así como el restablecimiento del servicio eléctrico.
Los familiares han nombrado un grupo de pastores evangélicos para que sirvan de mediadores en este conflicto, sin embargo, el Gobierno venezolano insiste en que mantendrá los operativos hasta que los "pranes" se rindan y depongan las armas.
Se estima que el número de muertos desde que estalló la crisis en El Rodeo I y II supera la treintena, pero los familiares afirman que la cifra podría ser aún mayor ya que todavía no se conoce el paradero de algunos internos que no figuran en los listados de los 2.500 reos que fueron trasladados a otras prisiones de Venezuela ni en las listas de los casi dos mil que aún permanecen en ese recinto judicial.
Supuestos "pranes" colgaron hace unos día en Internet un vídeo en el que denuncian la supuesta "masacre" de la Guardia Nacional Bolivariana dentro de El Rodeo II, la cual habría dejado "más de 160" presos abatidos.
Las familias han pedido la intervención directa del presidente venezolano, Hugo Chávez, mientras continúan con las acciones de protesta que han implicado el cierre de importantes calles así como manifestaciones en importantes lugares públicos, las cuales han sido reprimidas por la Guardia Nacional Bolivariana, de acuerdo a la denuncia de las propias víctimas.