CARACAS, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha celebrado la "victoria moral" del país al conseguir la reelección como miembro del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, a pesar de la "campaña mundial" supuestamente orquestada por Estados Unidos para evitarlo.
"Gran victoria moral. Hemos sido reelectos para el Consejo de Derechos Humanos de la ONU (...) le doy la gracias a los gobiernos y pueblos del mundo por ratificar su apoyo a Venezuela", ha escrito en su cuenta oficial de Twitter.
Maduro ha planteado este resultado como una hazaña porque "el Gobierno de Estados Unidos hizo una campaña mundial contra Venezuela, en alianza con la derecha, y fue derrotado nuevamente por la patria de (Simón) Bolívar".
"La mentira y la agresión del imperio contra la patria de Bolívar y (Hugo) Chávez, lo que hace es fortalecernos en el mundo", ha subrayado. "Dignos y victoriosos", ha remachado.
Venezuela ha recibido el apoyo de 131 de los 193 países de la ONU para renovar por otros dos años su estancia en el Consejo de Derechos Humanos, formado por 47 países bajo el criterio de la representación regional. Ecuador y Panamá han completado el bloque latinoamericano.
El embajador venezolano en la ONU, Rafael Ramírez, ha asegurado que "han pretendido quebrar la unidad de la región de América Latina y el Caribe lanzando una candidatura distinta a la que ya se había acordado", a favor de Venezuela.
"Pero Naciones Unidas respondió en bloque a favor de nuestro país, no cayó en la trampa, no cayó en el chantaje, no cayó en todas las manipulaciones y hemos dado una lección nuevamente a los que pretenden dividirnos", ha destacado.
Un total de 36 ONG habían reclamado que Venezuela no fuera reelegida como miembro del Consejo de Derechos Humanos porque el Gobierno de Nicolás Maduro "ha vulnerado seriamente los estándares" en esta materia. "Enviaría el peligroso mensaje de que la comunidad internacional es indiferente a las violaciones de Derechos Humanos", esgrimieron.
El Club de Madrid también había pedido que se condicionara la renovación de Venezuela como miembro del Consejo a que el Gobierno de Maduro libere a los presos políticos y autorice una misión de observación electoral "imparcial".