Advierte de que actuará "con mano de hierro frente a las conspiraciones de la derecha"
CARACAS, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha mostrado este domingo un documento firmado recientemente por el presidente, Hugo Chávez, en medio de los rumores sobre su estado de salud, al tiempo que ha advertido de que "el Gobierno actuará con mano de hierro frente a las conspiraciones de la derecha".
Maduro ha explicado que "el ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, ha sometido a consideración (de Chávez) la anexión de las áreas de la empresa mixta Petrocabimas, entre otras recomendaciones", y que "el presidente lo ha aprobado como parte del proceso de fortalecimiento de Petróleos de Venezuela SA (PDVSA)".
Para probarlo, el 'número dos' ha enseñado a las cámaras de Venezolana de Televisión (VTV) el documento firmado por Chávez que, según ha explicado, ha traído el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, que acaba de regresar de La Habana.
"Nosotros, afortunadamente, estamos funcionando. Tenemos un presidente mandando y con él somos una revolución en el poder político", ha dicho el ex ministro de Exteriores, en alusión a las críticas de la oposición, que asegura que el Gobierno "está paralizado".
El vicepresidente ha realizado este movimiento en medio de los rumores que han surgido en la prensa nacional e internacional sobre el estado de salud de Chávez, después de que el pasado 11 de diciembre se sometiera a su cuarta intervención quirúrgica por un tumor cancerígeno.
Su prolongada ausencia de Venezuela, la más larga desde que llegó al poder, hace 12 años, ha hecho sospechar que su estado es muy delicado, a pesar de que Cabello ha insistido este domingo en que "sigue avanzando paulatinamente en su recuperación".
A este respecto, ha advertido de que "el Gobierno va a actuar con mano de hierro frente a la conspiración y la traición a la patria", al tiempo que ha pedido "a los dirigentes de la Revolución Bolivariana en cada estado, en cada municipio, en cada parroquia y en cada barrio, que hagan lo mismo".
Maduro se ha referido a la visita que el líder de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), Henrique Capriles, ha realizado este fin de semana a Colombia. "Ellos fueron allá a conspirar, a sabotear la economía, a meter paramilitares para que cometan asesinatos en nuestro país y para buscar dinero producto del lavado de dólares y de la corrupción", ha denunciado.
En contraposición, ha destacado la unidad del Gobierno y de los venezolanos en torno a Chávez. "Estamos aquí respaldando y acompañando al presidente. Tenemos que representar cada día la ética de la gran política. Estamos obligados a transformarnos en hombres y mujeres que sirvamos a la felicidad de nuestro pueblo", ha dicho.
"SORPRESAS CÍVICO-MILITARES"
Por otro lado, el 'número dos' ha adelantado que habrá "sorpresas cívico-militares" durante la celebración en la capital venezolana, Caracas, de los 21 años de la "rebelión militar", que se cumplen este 4 de febrero.
"Nuestra Fuerza Armada y todo nuestro pueblo trabajador y luchador se irá a las calles para un acto gigantesco de homenaje al comandante Hugo Chávez y a las glorias de aquel 4 de febrero de 1992", ha anunciado, en declaraciones recogidas por la cadena Globovisión.
Hace una semana, Cabello detalló que el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) protagonizará tres marchas que desembocarán en la Plaza Pagüita de Caracas, ubicada en los alrededores del Palacio de Miraflores, sede presidencial.
Las tres columnas partirán desde el Museo Histórico Militar, después del acto conmemorativo que se celebrará a las 12.00 horas (18.30 horas en España), y recorrerán el Parque del Oeste Alí Primera, la Plaza de los Capuchinos y la Plaza Morelos.
El 4 de febrero de 1992, un grupo de militares liderados por Chávez, Jesús Urdaneta, Francisco Arias Cárdenas y Yoel Acosta Chirinos llevaron a cabo un intento de golpe de Estado contra el Gobierno de Carlos Andrés Pérez (1974-1979 y 1989-1993).
Todos los implicados en la intentona golpista --incluidos sus líderes-- fueron encarcelados, pero finalmente se sobreseyó la causa y fueron puestos en libertad dos años después, bajo la Presidencia de Rafael Caldera (1969-1974 y 1994 y 1999).