Publicado 26/05/2020 17:58

Venezuela.- Los países de la región reiteran su solidaridad con los migrantes venezolanos pero piden apoyo internacional

Venezuela.- Los países de la región reiteran su solidaridad con los migrantes ve
Venezuela.- Los países de la región reiteran su solidaridad con los migrantes ve - 2020 GETTY IMAGES / GUILLERMO LEGARIA

Advierten de los desafíos que supone su integración ante el impacto que la pandemia de coronavirus está teniendo en todos ellos

MADRID, 26 May. (EUROPA PRESS) -

Los ministros de Exteriores de los principales países receptores de migrantes y refugiados venezolanos en la región han reiterado este martes su solidaridad con ellos y su deseo de integrarlos en sus respectivas sociedades pero han advertido de que necesitan más apoyo internacional, habida cuenta del impacto que la pandemia de la COVID-19 está teniendo en el plano sanitario pero también económico.

Durante su intervención en la conferencia de donantes para los migrantes y refugiados venezolanos organizada por España y la UE, todos ellos han puesto en valor los esfuerzos realizados hasta ahora por sus respectivos gobiernos para cubrir las necesidades básicas de los venezolanos que han llegado en los últimos años a su territorio y su deseo de seguir haciéndolo, también ahora durante la pandemia.

La ministra de Exteriores colombiana, Claudia Blum, ha llamado la atención sobre el hecho de que las previsiones de la ONU son que los 5 millones de migrantes y refugiados venezolanos actuales pasen a ser 6,5 millones para finales de 2020, de los que 2,4 millones estarían en Colombia, el principal país receptor y que actualmente acoge a 1,8 millones.

El Gobierno colombiano, ha señalado Blum, se ha enfrentado a "grandes desafíos" a la hora de ofrecer a todos ellos servicios sociales básicos pero "no puede cubrir las necesidades solo, más ahora en la emergencia actual". Así, ha lamentado que de los fondos requeridos a nivel internacional apenas se han recabado "doce dólares por migrante". "Tenemos que abordar más que nunca las necesidades de los migrantes y las comunidades de acogida", ha advertido.

Por su parte, su homólogo peruano, Gustavo Meza-Cuadra, ha destacado el "gran esfuerzo" asumido por Perú, segundo país de destino con más de 870.000 venezolanos y el primer receptor de solicitudes de asilo, y el "desafío sin precedentes en todos los ámbitos" que supone brindar asistencia a todos ellos. "La compleja coyuntura de la COVID-19 ha venido a agravar esta situación", ha reconocido.

El Gobierno peruano ha asumido el "reto de integrarlos en la sociedad" y también apuesta por seguir "trabajando "para una solución pacífica y democrática liderada por los propios venezolanos a la grave crisis que atraviesa el país con nuestros socios del Grupo de Lima", ha precisado Meza-Cuadra.

CHILE APUESTA POR LA INTEGRACIÓN

El ministro de Exteriores chileno, Teodoro Ribera, ha dejado clara la apuesta del Gobierno de Sebastián Piñera por una "migración segura, ordenada y regular, que beneficia a los países y los refugiados" y ha manifestado que el objetivo no es solo que los migrantes que llegan a Chile "se integren y gocen de los beneficios sociales y puedan rehacer sus vidas".

Dada la vulnerabilidad con que llegan muchos venezolanos, supone un "gran desafío" satisfacer sus necesidades por lo que, ha incidido Ribera, se requiere solidaridad y cooperación de los miembros de la comunidad internacional y un compromiso para compartir responsabilidad de los países de la región".

"Chile está haciendo lo posible para contribuir a esta crisis sin precedentes pero no puede hacerlo sin la ayuda internacional", ha recalcado el canciller, que ha apostado igualmente por la colaboración regional y multilateral para que en último término "la ayuda llegue a quien tiene que llegar, los migrantes y refugiados venezolanos".

En una línea similar se ha expresado el canciller de Ecuador, José Valencia, que ha recordado la "importante desaceleración económica" vivida recientemente por el país y los "nuevos desafíos" que trae ahora aparejada la pandemia del coronavirus no solo para reactivar la economía sino también para mantener la institucionalidad democrática.

La Constitución ecuatoriana, ha recordado, garantiza el acceso a servicios básicos a todas las personas, incluidos los extranjeros, pero el país "requiere nuevos recursos de financiamiento y financiamiento no reembolsable". "El apoyo internacional es clave", ha reconocido, confiando en que "la cooperación de los donantes ayudará a enfrentar los retos" ante la "más importante emergencia que haya visto el continente americano".

LAS AGENCIAS DE LA ONU ALABAN LA SOLIDARIDAD REGIONAL

Por su parte, los titulares de las dos agencias de la ONU encargadas de trabajar con los migrantes y refugiados venezolanos también han resaltado la solidaridad demostrada en los últimos años por los países de la región, donde se han quedado el 80 por ciento de los venezolanos que han salido del país, y han advertido del particular impacto que el coronavirus tiene en ellos.

"Durante demasiado tiempo los países de acogida han asumido la responsabilidad con escasa ayuda exterior pero necesitan urgentemente más apoyo, en especial de las instituciones financieras y de desarrollo", ha defendido en su intervención el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi. "Hoy tenemos la oportunidad de marcar la diferencia y movilizar recursos adicionales", ha sostenido con el fin de "demostrar nuestra solidaridad" con estos países, ha añadido.

"La región respondió desde el principio con solidaridad, hospitalidad y generosidad y movilizó sus propios recursos de sus presupuestos", ha valorado el director de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Antonio Vitorino, que ha elogiado el que muchos de estos países también se estén esforzando ahora por incluir a los venezolanos en la respuesta frente a la pandemia y ha confiado en que los compromisos que se anuncien en la conferencia "estén a la altura del reto".

A su vez, el representante especial de ACNUR y OIM para esta crisis, Eduardo Stein, ha recalcado que hace falta la ayuda internacional "para evitar un mayor deterioro de la crisis y permitir que los gobiernos incluyan a los migrantes y refugiados en sus programas nacionales y políticas".

DESBLOQUEAR LOS FONDOS CONGELADOS

Por parte de las organizaciones humanitarias, la intervención más contundente ha sido la del presidente del Consejo Noruego de Refugiados, Jan Egeland, que ha subrayado la importancia de "aumentar la solidaridad" tanto dentro como fuera de Venezuela y para ello ha propuesto una fuente de financiación hasta ahora no contemplada.

"Los cientos de millones de dólares venezolanos bloqueados en bancos europeos y estadounidenses que pueden llegar a los venezolanos en necesidad de forma neutral e imparcial a través de Naciones Unidas y de las organizaciones internacionales y eso puede pasar ahora si hay voluntad política", ha dicho.

Egeland ha hablado en nombre varias organizaciones humanitarias dedicadas a la crisis venezolana, que han reclamado "más fondos" y que lleguen "directa, inmediata y predeciblemente" a ellas, recalcando que el 80 por ciento de los actores humanitarios que intervienen en el plan de respuesta regional son estas ONG.

El jefe del CNR ha descrito las "impactantes necesidades sin atender" de las que fue testigo en su viaje del pasado mes de marzo a Colombia y Venezuela y ha alertado de que, si bien "los países latinoamericanos han abierto generosamente las fronteras, dando un refugio seguro a los venezolanos (...), las comunidades de acogida empiezan a estar exaustas".

Esto se ha traducido en "una creciente discriminación y marginalización de los venezolanos vulnerables", ha indicado, por lo que ha urgido a hacer todo lo posible para que no pierdan el acceso a servicios básicos de salud, educación o vivienda e incluso a protegerlos ante "un posible retorno forzado".