MANAGUA, 3 Oct. (Notimérica) -
Zoilamérica Narváez, hijastra del presidente nicaragüense, Daniel Ortega, reveló en una entrevista concedida al medio estadounidense 'CNN en español' en la noche de este lunes que "el arma más importante que Daniel Ortega utilizó conmigo y utiliza hoy con el país es la manipulación. Quiere hacer de Nicaragua toda una cárcel que esté a la medida de sus intenciones", afirmó.
Narváez, con esa frase, hace referencia a los abusos sexuales que --con nueve años-- recibió presuntamente por parte del mandatario y que denunció en 1998. Ortega siempre ha negado las acusaciones y los cargos han sido desestimados por la justicia. Rosario Murillo, madre de Zoilamérica, mujer de Daniel Ortega y vicepresidenta del país, ha rechazado públicamente las acusaciones defendiendo a su marido.
La también socióloga reconoció durante la entrevista que la figura del mandatario le inspira "miedo y desconfianza", añadiendo que nunca lo vio leer un libro, bailar ni cantar. Además, relató que tras contar a su madre que sufría abusos, esta la culpó de haberlo provocado y le prohibieron convivir con sus hermanos, por lo que fue excluida de la familia.
FORTALEZA Y PRISIÓN
Narváez también habló de su madre: "Necesita sentirse la persona que decide y controla todo, recluida junto a Ortega en su enorme residencia del barrio El Carmen de Managua. Toda la familia vive tras unas murallas donde se gobierna, se vive y se dirige el destino del país y el de sus hijos. El Carmen es una especie de fortaleza y de prisión para ellos mismos", declaró.
Confesó que nunca imaginó que Ortega y su progenitora fueran capaces de responder a las protestas con una acción policial violenta dejando cientos de muertos y más de 2.000 heridos. "Supimos que el régimen se iba a ir deformando pero nunca imaginamos que Daniel y Rosario iban a ordenar disparar en una marcha, eso ya pasa los límites", sentenció.
Sobre las acciones que está llevando a cabo la población nicaragüense relató que "Nicaragua rompió el silencio y lo hizo de una manera extraordinaria, es decir, que --en horas-- un país se autoconvocó, se organizó y definió un proceso de desobediencia civil sin un líder evidente".