Actualizado 11/07/2013 23:44

74 personas detenidas e incautados 575 kilos de cocaína en operación Guardia Civil y DEA

Cifuentes operación antidroga
DELEGACIÓN DE GOBIERNO

Se han desmantelado cinco laboratorios (tres en Madrid) y se han incautado 11 armas de fuego y 588.000 euros en metálico


MADRID, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -

Un total de 74 personas han sido detenidas en una macrooperación antidroga llevada a cabo por la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid en colaboración con la Drug Enforcement Agency (DEA) estadounidense y en la que se han incautado 575 kilos de cocaína.

En rueda de prensa, la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha detallado que en esta operación policial, se han incautado 11 armas de fuego, dinero en efectivo y 30 kilogramos de sustancias para corte (tetracaína y fenacetina), 588.000 euros en metálico y 10 armas largas y cortas y un fusil de asalto tipo AK-47.

Además, los efectivos policiales han intervenido siete vehículos de alta gama, siete millones de dólares en moneda fraccionada, propiedades inmuebles valoradas en más de 15 millones de dólares y material de laboratorio (molinillos, moldes, productos químicos, lámparas o balanzas de presión).

El Comandante de la Guardia Civil, Javier Rogero, ha destacado que en esta acción policial, apodada como 'Operación Gallego', se ha logrado detener al cabecilla de la organización de nacionalidad colombiana, Alex P.G, alias 'el turco', que dirigía el tráfico de cocaína entre Sudamérica y Europa desde Brasil.

Junto al líder de la banda, ha sido detenidos sus dos lugartenientes. El primero de ellos era el cuñado del cabecilla y sus "mano derecha" Alejandro R.G., 'Alex el negro'. Esta persona, también de origen colombiano, se encargaba de viajar entre España, Uruguay, Colombia y Panamá, donde fue detenido.

El otro pilar de 'el turco' era Sonia R. M de nacionalidad española y casada con un importante cabecilla de la mafia de la Toscana, que actualmente se encuentra en una prisión italiana. Esta mujer, afincada en Madrid, al hablar italiano se encargaba de cerrar los negocios de la banda en este país.

Precisamente, según ha destacado Rogero, casi el 70 por ciento de la droga que la banda lograba introducir en España se dirigía posteriormente a Italia, donde el precio de la cocaína es más elevado.

Otro de los miembros de la banda y hermano de Sonia, Antonio R. M. se encargaba de efectuar los cobros y de mantener la disciplina interna de la organización. Rogero ha destacado que esta persona es "muy agresiva" y que "no dudaba en utilizar la violencia para hacer cumplir sus fines".

SACABAN LA DROGA MEDIANTE 'MULAS'

Asimismo, los miembros de la banda se valían de personas, conocidas como 'mulas', que ocultaban el dinero obtenido de las ventas de cocaína adosado en forma de planchas a sus cuerpos, para llevarlo a Brasil. A titulo de ejemplo, Rogero ha destacado que los agentes lograron interceptar a una mujer en el Aeropuerto de Barajas con 100.000 euros adosados a su cuerpo.

La organización mantenía fuertes medidas de seguridad para detectar una posible presencia policial o evitar ser seguidos por miembros de otros grupos dedicados al narcotráfico. De esta forma, los miembros de la banda casi siempre utilizaban taxis en sus desplazamientos por las ciudades y cambiaban de domicilios con bastante frecuencia.

Dos de los principales objetivos de la operación resultaron muertos en el transcurso de la misma, siendo uno tiroteado en la puerta de su domicilio de Panamá y otro quemado dentro del maletero de su vehículo en Colombia.

De los 74 integrantes de este grupo de personas dedicado al tráfico de cocaína, 70 eran hombres y 4 mujeres. Los detenidos tienen edades comprendidas entre los 26 y los 59 años y son de origen español, colombiano, portugués, iraní, boliviano. Muchos de ellos cuentan con antecedentes policiales por delitos relacionados contra la salud pública (tráfico de drogas).

DESMANTELADOS CINCO LABORATORIOS, TRES EN MADRID

Cifuentes ha explicado que en esta acción policial se han desmantelado cinco laboratorios que la banda utilizaba para adulterar la pureza de la cocaína. Estos laboratorios estaban localizados en Benalmádena, Boadilla del Monte, Córdoba y los barrios madrileños de Las Rosas y Entrevías.

La pureza de esta droga cuando la introducían en España era del 85 por ciento, pero después de mezclarla con otras sustancias se quedaba en el 60 por ciento. Según ha destacado Rogero, la banda "estiraba como un chicle" la pureza de la cocaína que llevaban a Italia.

La droga llegaba a los laboratorios después de que la banda hubiera introducido la droga en España. Para ello la banda ocultaba la cocaína en el interior de grandes piezas de material industrial o la introducía en contenedores de mercancías mediante el método de 'el gancho'.

Cuando la cocaína estaba dispuesta para ser vendida, componentes de la organización la transportaban hasta Francia e Italia mediante dobles fondos ocultos en las carrocerías de vehículos.

LA INVESTIGACIÓN COMENZÓ A FINALES DE 2010

Las investigaciones comenzaron hace dos años y medio. En concreto, a finales del año 2010, cuando el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA), de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, tuvo conocimiento de la existencia de una organización que pudiera estar introduciendo, en España, sustancias estupefacientes procedentes de Sudamérica.

Tras las primeras averiguaciones se pudo saber que dicha organización estaba siendo investigada, a su vez, por personal destacado en la DEA, por lo que se aunaron esfuerzos para conseguir desmantelar a este grupo delictivo. Así, tras meses de investigación se llegó hasta esta red.

Esta investigación se ha desarrollado en varias fases a lo largo de estos dos últimos años y se ha intervenido en diversos lugares del territorio español. También se han efectuado diferentes investigaciones en Marsella (Francia), en donde se interceptaron dos vehículos, uno de ellos con un doble fondo en el que se encontraron 30 kilogramos de cocaína.

Los efectivos policiales también desarrollaron su investigación yen varias localidades de Brasil, incluida su capital Río de Janeiro, lugar en el que se detuvo al cabecilla de esta organización criminal.

La operación ha sido llevada a cabo por el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, con la colaboración de la Unidad Técnica de Policía Judicial de la Jefatura del Servicio de Policía Judicial de la Guardia Civil, y en coordinación con tres Secciones de la DEA (Estados Unidos), Policía Federal Brasileña, y miembros de la Policía de Aduanas y de Fronteras de Francia.