BOGOTÁ, 6 Jun. (Reuters/Notimérica) -
El Gobierno de Colombia y los líderes sociales del puerto de Buenaventura, el más importante del país sobre el Océano Pacífico, lograron este martes alcanzar un acuerdo para poner fin a una protesta de 21 días que paralizó el comercio internacional y represó una enorme cantidad de carga, informaron las partes.
Los habitantes de Buenaventura, una ciudad portuaria golpeada por la pobreza y la violencia, reclaman al Gobierno un mejor servicio en el suministro de agua potable, salud y educación, en una protesta que generó saqueos a supermercados y bloqueos de vías que impidieron la entrada y salida de camiones para mover la carga.
"El acuerdo más importante logrado entre las dos partes es la elaboración de un proyecto de ley para la creación de un plan de desarrollo especial a 10 años que beneficie al distrito de Buenaventura con la ejecución de proyectos, programas e iniciativas financiadas a través de un patrimonio autónomo", señaló un comunicado del Gobierno.
Asimismo, el Ejecutivo presentará al Congreso un proyecto de ley para la creación del fondo de patrimonio autónomo que definirá la cuantía, las fuentes de financiación, así como los proyectos y programas a ejecutar para satisfacer los derechos sociales y económicos de los más de 400.000 habitantes de Buenaventura.
Los dirigentes sociales que negociaron en representación de la comunidad anunciaron que la prioridad será garantizar el acceso al agua potable, las construcción de redes de alcantarillado y plena cobertura de la salud y educación.
La protesta provocó el represamiento de 309.000 toneladas de carga y de 33.635 contenedores en cinco terminales portuarios, además de 13 buques que estaban fondeados con 249.432 toneladas y unos 4.500 camiones.
La Asociación Nacional de Empresas Transportadoras de Carga por Carretera estimó que en 45 días se evacuará la carga y se recuperará la normalidad en el puerto. Buenaventura mueve más del 50 por ciento de las importaciones y un cinco por ciento de las exportaciones de Colombia, incluidas una parte de las de café.
El Gobierno del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, se enfrenta una ola de protestas sociales que incluye una huelga de más de 350.000 profesores de escuelas y colegios públicos.