MADRID, 27 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Papa Francisco sorprendió el mediodía pasado domingo a una mujer argentina al llamarle por teléfono para darle ánimos, tras haber recibido una carta suya pidiéndole ayuda días atrás. Alejandra Pereyra, que había sido víctima de una violación por parte de un policía en el país andino, asegura que, cuando oyó la voz del Papa, "le pareció haber sido tocada por la mano de Dios", según declaró al canal 10 de la Universidad Nacional de Córdoba (Argentina).
Pereyra mantuvo una conversación de cerca de 30 minutos con el pontífice católico, durante los que le explicó su caso y el presunto encubrimiento del crimen que, a su juicio, se estaba produciendo por parte de la justicia argentina.
"El Papa dijo que le había conmocionado mi carta y me dijo que no estaba sola, que se iba a hacer justicia", explica la argentina, residente en la localidad de Villa del Rosario, que asegura que "se pondrá en pie nuevamente y que piensa viajar a Roma porque Francisco le dijo que le quería conocer personalmente".