MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
La basura está acumulándose en las calles y plazas de La Paz, la capital boliviana, tras cinco días de huelga indefinida de los basureros, que exigen el pago de salarios atrasados a la empresa contratista.
"Pedimos disculpas a nuestros vecinos y les pedimos también que se pongan en nuestros zapatos, en nuestro lugar, en nuestras espaldas, estamos reclamando salarios velando por nuestras familias", ha declarado un portavoz del sindicato de la empresa La Paz Limpia (LPL), Richard Bueno.
El paro, que incluía bloqueos de calles aledañas al edificio central de la Alcaldía, fue declarado el pasado jueves 22 tras fracasar una negociación entre el gobierno municipal y el sindicato de la empresa contratista.
Medios como Radio Éxito han informado de que la basura aumenta a un ritmo de más de 700 toneladas diarias en medio de un duro cruce de acusaciones entre el alcalde saliente, Luis Revilla, y el alcalde electo, Iván Arias, quien asumirá el gobierno local a principios de mayo.
Según Bueno, la Alcaldía adeudaría a LPL al menos 50 millones de bolivianos, equivalentes a unos siete millones de euros, y por esta razón la empresa contratista habría suspendido desde febrero los pagos de salarios.
El sindicalista ha instado a la población a no llevar la basura a los contenedores callejeros, ya sobrecargados, para evitar que los desechos queden esparcidos y al alcance de los miles de perros que deambulan por la ciudad.