Actualizado 10/02/2010 21:00

Bolivia.- Bolivia advierte de la llegada de un nuevo temporal de lluvia que afectará al norte y este del país

Las lluvias de los últimos días han dejado al menos 15 muertos y más de 28.000 afectados


LA PAZ, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -

El viceministro de Defensa Civil de Bolivia, Hernán Tuco, advirtió este miércoles a su población de la llegada de nuevas lluvias al departamento de Beni, en el norte del país, que durarán al menos 10 días y que se extenderán a otras regiones del este, por lo que recomendó a los bolivianos que se desplacen hacia zonas del altiplano.

Ante las previsiones del Servicio Nacional de Meteorología, el Centro de Operaciones de Emergencias de cada departamento del país y el Ministerio de Defensa Civil se encargarán de proporcionar la asistencia necesaria a los habitantes de dichas regiones, así como de distribuir la ayuda entre los damnificados que, hasta el momento, rozan los 28.000.

"Estamos trabajando el Gobierno, la cooperación internacional y las Naciones Unidas para atender estos desastres", dijo el ministro e indicó que las inundaciones no son la única preocupación del Gobierno boliviano ya que cerca de 25 municipios sufren un severo estiaje como consecuencia del fenómeno climático 'El Niño' que provoca estos desajustes.

En este contexto, Tuco anunció que a finales de este mes las autoridades estatales y locales comenzarán la etapa de asistencia para fortalecer a pequeños y grandes empresarios ganaderos con la concesión de insumos para alimentar a los animales que han visto disminuir sus provisiones debido al temporal.

El Gobierno calcula que las labores realizas hasta el momento han tenido un coste de cerca de 75 millones de dólares (54,6 millones de euros) en ayudas a damnificados por las inundaciones y la sequía.

La situación humanitaria en Bolivia tras las intensas lluvias de los últimos días --que han dejado al menos 15 muertos y más de 28.000 afectados-- ha puesto en alerta a diversos países y organismos internacionales que han volcado su ayuda en el país iberoamericano.

El Programa Mundial de Alimentos (PMA) concedió medio millón de dólares a las autoridades bolivianas para adquirir 540 toneladas de comida, a las que se sumaron los víveres, carpas y otros enseres facilitados por Naciones Unidas, así como la ayuda de Japón para la rehabilitación agropecuaria.