LA PAZ (BOLIVIA), 3 Ago. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, Paulino Guerra) -
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, se desplazará hoy hasta la provincia boliviana de Santa Cruz de la Sierra, para imponer la medalla de Oro del Trabajo al padre Nicolás Castellanos, en reconocimiento a su labor, en el Barrio Plan 3000, en la citada provincia. A través de ese proyecto se han creado escuelas, comedores, centros de salud y otros proyectos de desarrollo.
Nicolás Castellanos fue obispo de la Diocésis de Palencia entre los años 1978 y 1991. Su decisión de abandonar el obispado para trabajar como misionero en Bolivia provocó en su momento un fuerte impacto mediático al tratarse de una decisión poco habitual. Nacido en Mansilla del Páramo (León) y descendiente de una familia humilde, Castellanos se ordenó sacerdote en 1959 tras profesar los votos religiosos en la Orden Agustina.
Durante su etapa de obispo de Palencia siguió un vida sencilla y se caracterizó por estar siempre al lado de los más débiles. Visitaba con frecuencia zonas marginales, compartía su tiempo con los ancianos, con los niños huérfanos, con toxicómanos y presos. De la Vega llegará mañana a Santa Cruz desde La Paz, donde hoy se entrevistó con el presidente Evo Morales y tuvo entre otras actividades un almuerzo de trabajo con el vicepresidente, Álvaro García Linera.
De la Vega también visitará un proyecto de cooperación en el Barrio Plan 3000 y posteriormente tendrá un encuentro con la colectividad española y representantes de las ONGs en el Centro de Formación de la Cooperación Española. A continuación viajará a Lima, para iniciar la visita al Perú, tercer país de la gira iberoamericana de la vicepresidenta.