BRASILIA, 7 May. (Notimérica) -
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró este lunes que su Gobierno pretende que las capitales de los 27 estados del país cuenten al menos con un colegio militar.
"Proponemos, junto al Ministerio de Defensa y el de Educación, un colegio militar en todas las capitales de Brasil", indicó el mandatario en un acto de conmemoración de los 130 años del Colegio Militar de Río de Janeiro, según informó el diario 'Folha de Sao Paulo'.
El gigante iberoamericano cuenta con 13 colegios militares, 11 de ellos en las capitales de los estados; la promesa de Bolsonaro implicaría construir 16 nuevos centros.
Asimismo, Bolsonaro sostuvo que "respeto, disciplina y amor a la patria" son fundamentos importantes en esos colegios, que se destacan en las evaluaciones de educación básica, en muchos casos liderando rankings de excelencia.
Además, el jefe de Estado aseguró que su Gobierno ya está ultimando los detalles para construir el mayor colegio militar del país, en el espacio que por el momento ocupa el aeropuerto Campo de Marte en Sao Paulo.
La semana pasada, el Ministerio de Educación anunció la semana pasada un recorte del 30 por ciento del presupuesto destinado a institutos y universidades públicas federales, dependientes del Gobierno central.
Antes de este anuncio, Bolsonaro comunicó que el nuevo ministro de Educación, Abraham Weintraub, estudiaba la posibilidad de suspender la inversión en las facultades de filosofía y sociología. "El objetivo es enfocarse en áreas que generen retorno inmediato al contribuyente como: veterinaria, ingeniería y medicina", explicó el presidente.
PROTESTAS
Cientos de personas protestaron este lunes en Río de Janeiro contra el anuncio del Gobierno de reducir un 30% el presupuesto a las universidades e institutos federales.
La protesta tuvo lugar en las inmediaciones del Colegio Militar, en el barrio de Tijuca, en la zona norte de Río de Janeiro, donde el presidente participó en un acto para conmemorar los 130 años de esa institución.
"Somos un país en busca de derechos para nuestros hijos", "Un gobierno que no invierte en educación condena a toda la nación" o "No deje a la educación morir", eran algunos de los mensajes que se leían en las pancartas que enarbolaban los estudiantes, padres y profesores allí reunidos.