Actualizado 16/06/2011 21:24

Llegan a Francia los 104 cuerpos recuperados del accidente del vuelo Río-París

Una De Las Dos Cajas Negras Del Avión Del Vuelo AF447 De Air France
MT PESCHEL

La identificación de los restos llevará "meses", tras cumplirse el pasado 1 de junio dos años del accidente


PARÍS, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -

Los 104 cuerpos rescatados del Atlántico de entre las 228 víctimas del accidente del avión de Air France que cayó al mar hace ahora dos años frente a las costas brasileñas llegaron este jueves a Francia, donde durante los próximos meses se procederá a su identificación, según informa el diario 'Le Figaro'.

Los restos de las víctimas que han podido recuperarse se trasladarán mañana viernes al Instituto Médico Legal de París para ser identificados junto con las muestras de AND extraídas, lo que podría llevar "meses". "El proceso será rigurosamente controlado científicamente y legalmente", aseguró el director del Instituto de Investigación Criminal de la Gendarmería Nacional (IRCGN) francesa, el coronel François Daoust.

Al respecto, Daost recordó que la identificación de los 50 cuerpos recuperados en 2009, poco después del accidente, llevó dos meses.

Francia puso fin al operativo de búsqueda hace dos semanas, que dirigido por la Oficina de Investigaciones y Análisis para la Seguridad Aérea de Aviación Civil (BEA, por sus siglas en francés), se ha prolongado desde finales de abril a junio y ha permitido recuperar más de una centena de restos a más de 3.900 metros de profundidad.

Los 70 cadáveres restantes no han podido ser rescatados de entre los restos del aparato por su estado de degradación.

El buque, el 'Ile de Sein', encargado de realizar las tareas de búsqueda de los cuerpos, hizo escala en Las Palmas de Gran Canaria y atracó este jueves en el puerto de Bayona, al suroeste de Francia.

A LA ESPERA DEL INFORME DEFINITIVO.

Los investigadores y expertos han recuperado también restos del fuselaje del avión siniestrado, un A330, que transportan en tres contenedores. Las piezas del Airbus se trasladarán a Toulouse, donde el fabricante tiene su sede, para proseguir con las investigaciones pertinentes por parte de la BEA.

Actualmente, los expertos han centrado su trabajo en el análisis de las cajas negras del aparato, recuperadas en mayo durante esta quinta campaña de búsqueda, que permitieron detallar las circunstancias en las que se produjo el accidente y las conversaciones en cabina. No obstante, hasta julio la BEA no emitirá su informe definitivo sobre las causas del accidente.

Este será el tercer informe de la BEA, tras más de dos años de búsqueda de restos del aparato en un área de 10.000 kilómetros a casi 4.000 metros de profundidad bajo el mar, y el análisis de más de 1.000 fragmentos del avión.

Los anteriores informes provisionales de la BEA apuntaban a que la aeronave atravesaba un frente de tormenta minutos antes del accidente y la lectura de los indicadores de velocidad no era la adecuada, por lo que recomendó la sustitución de las sondas de velocidad, conocidas como 'pitot' de la marca Thales, ante las dudas de su fiabilidad a gran altura. Además, el sistema de alerta no funcionó.