Actualizado 13/11/2011 16:05

Brasil.- Las fuerzas de seguridad emprenden una redada sin precedentes en favela más poblada de Río de Janeiro


MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS - 9

Más de 3.000 efectivos han entrado este domingo acompañados de helicópteros y vehículos acorazados en la favela de Rocinha, la más grande de Río de Janeiro con una población de más de 100.000 personas, sin que hasta el momento se tenga constancia de incidentes violentos.

La operación de "pacificación" en Rocinha, según el Gobierno brasileño, se enmarca en los preparativos de seguridad para reducir la criminalidad en la ciudad antes de las Olimpiadas de 2014 que tendrán lugar en Río.

Antes de la operación, los helicópteros distribuyeron miles de panfletos en los que se advertía a la población de la favela de que "la comunidad estaba siendo pacificada" y se insta a sus ciudadanos a que "denuncien a los criminales, sus escondites, y la existencia de armas y drogas".

La invasión de Rocinha --y la vecina barriada de Vidigal-- se han convertido en un evento mediático seguido por la práctica totalidad de los medios de comunicación brasileños, locales y nacionales. Rodeados de cámaras de televisión, los agentes han registrado las viviendas de las favela sin recurrir a la violencia.

Se tiene constancia de un solo detenido, pero no hay informes de víctimas mortales o heridos, según la cadena de televisión GloboNews.

Por su parte, el gobernador del estado de Río, Sergio Cabral, ha informado a lo largo de toda la mañana a la presidenta de Brasil, Dilma Rouseff, a quien ha pedido un margen de tiempo más amplio para completar el procedimiento de seguridad.

"Hemos pedido a la presidenta que nos dé más tiempo para continuar con nuestras operaciones de pacificación en Río", declaró Cabral en comentarios recogidos por el diario 'O Globo'.

El secretario de Seguridad Pública, José Mariano Beltrame, ha destacado en rueda de prensa que la operación "ha arrojado unos resultados excelentes" y que con la incursión de las fuerzas de seguridad "se ha recuperado una zona que hace 30 o 40 años estaba en manos de un imperio paralelo".

Beltrame anticipó que una vez terminada la redada, "comenzará un trabajo más específico de rastreo" para hallar arsenales y escondites de droga. Mientras, agentes sociales empezarán en las próximas fechas a desarrollar trabajos de integración con la comunidad de la favela.