Actualizado 28/03/2006 18:37

Brasil.- Organizaciones ecologistas reclaman en Brasil una moratoria a la plantación de árboles transgénicos

Greenpeace propone la declaración de áreas marinas protegidas para luchar contra la pesca pirata


CURITIBA (BRASIL), 28 Mar. (de la enviada especial de EUROPA PRESS, María García) -

Organizaciones ecologistas presentes en la octava Conferencia de las Partes del Convenio de Diversidad Biológica (COP8) denunciaron hoy la existencia de plantaciones experimentales de árboles genéticamente modificados o transgénicos que se están desarrollando en Brasil, Chile, India, Sudáfrica, Estados Unidos, Indonesia y China, entre otros, y pidieron una moratoria hasta determinar los daños que pueden causar en los ecosistemas salvajes.

La co-directora del Proyecto Justicia Ecológica Global, Anne Petermann, aseguró en rueda de prensa que la finalidad de estos árboles transgénicos es comercial, y concretamente para la producción de madera y papel. Además en China se han plantado ya más de un millón de álamos Bt para evitar la expansión del desierto del Gobi y como freno a la desertificación. Los primeros estudios realizados sobre estos árboles genéticamente modificados han determinado que sus semillas son capaces de polinizar a más de 1.200 kilómetros, por lo que los ecologistas advirtieron de que no es sólo una cuestión de legislación nacional, ya que dado que pueden cruzar fronteras, es necesario abordarlo con normas internacionales.

Entre los impactos negativos de las plantaciones de árboles transgénicos, los ecologistas apuntaron la destrucción de la biodiversidad salvaje, la contaminación de bosques nativos, desertificación de suelos al no ser endemismos y efectos nocivos en la salud humana. Ante esta situación dañina para el medio ambiente, reclamaron a la Convención de Diversidad Biológica de Naciones Unidas una moratoria sobre la tecnología, y un estudio en profundidad y global de los riesgos de liberación de los árboles transgénicos.

Petermann explicó que las especies de árboles que se han modificado genéticamente hasta ahora son el eucalipto, pino y álamo, para hacerlos más resistentes a los insectos, al frío (para poder cultivar en zonas menos cálidas) y a los herbicidas. Además, estas especies no viven cientos de años como los 'árboles salvajes' sino que sólo producen madera o pasta para papel durante varios años.

RESERVAS MARINAS

Por otra parte, la organización ecologista Greenpeace propuso hoy la declaración de áreas marinas protegidas para luchar contra la pesca pirata. El barco de la organización 'Esperanza', que navega por aguas del Atlántico, ha detectado en los últimos 10 días un total de 67 barcos piratas que pescaban de forma ilegal frente a la costa de Guinea. Las banderas de los buques piratas corresponden a Corea, China, Liberia, Italia, Belize y China. Las autoridades guineanas arrestaron esta mañana a uno de los barcos con bandera china, según anunció hoy la asesora en Océanos de Greenpeace Internacional, Karen Sack.

De los 67 buques piratas denunciados por Greenpeace, 19 no tenían autorización para pescar, 22 tenían un historial de pesca ilegal, nueve tenían nombres falsos, y ocho se encontraban a menos de 12 millas de la costa, zona exclusiva de pesca para barcos locales.

La pesca ilegal supone el 20 por ciento de toda la pesca mundial y supone un coste de entre 4.000 y 5.000 millones anuales. Greenpeace calcula que existen alrededor de 300 barcos piratas navegando por todo el mundo, y cada cuatro segundos explotan una zona marina equivalente a 10 campos de fútbol, con lo que a este ritmo de extracción, en 16 años no quedarán pesquerías.

Ante esta situación, Greenpeace pidió hoy en la Cumbre de Biodiversidad que la Convención promueva la declaración de zonas marinas protegidas para asegurar la protección de los océanos. La organización pidió que el 40 por ciento de los mares esté protegido y, concretamente, las aguas del Atlántico Norte, Azores, este del Mediterráneo, Mar de Groenlandia, centro del Mediterráneo, Mar de los Sargasos, Patagonia, Sur de África, mares de Australia y Nueva Zelanda, Mar de Arabia, Golfo de Bengala, Mar del Coral, Pacífico occidental, Mar de Okhostsk y Golfo de Alaska, entre otros.