BRASILIA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
El jefe de la Policía de Medio Ambiente y Patrimonio, Fabio Scliar, ha admitido este sábado que el procedimiento elegido por Chevron para limpiar el petróleo en la Cuenca de Campos fue interrumpido por un nuevo delito ambiental cometido por la empresa.
Como consecuencia, Sciliar ha confirmado que Chevron deberá suspender las tareas actuales y proceder a la eliminación del petróleo, tal y como requieren los expertos.
Por su parte, Chevron ha argüido que dichos métodos están "aprobados por el Gobierno brasileño, incluyendo las barreras de contención, 'skimming' y técnicas de lavado para controlar, recolectar y reducir la mancha". A su favor, ha puntualizado, los barcos han recogido hasta ahora "más de 250 metros cúbicos de agua contaminada por la mancha".
Sin embargo, el Secretario de Estado brasileño de Medio Ambiente, Carlos Minc, ha contravenido los argumentos de Chevron y ha coincidido con Sciliar al señalar que están utilizando el bombeo de arena para "empujar" el petróleo al fondo del mar, lo que está considerado un delito medioambiental.
El oceanógrafo David Uerj ha sido el experto designado por la Policía Federal para supervisar la investigación, si bien Sciliar se ha apresurado a desmentir su existencia, según ha informado el periódico brasileño 'O Globo'.
El próximo lunes, la Policía Federal espera recibir la documentación pertinente, así como los detalles aportados por la empresa estadounidense sobre de la fuga, sobre sus planes de perforación y licencias de emergencia, y la información de la plataforma de perforación.