MADRID, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
Este viernes 31 de octubre llega a Netflix la segunda temporada de 'Respira', el drama médico creado por Carlos Montero. Mientras que la anterior entrega tenía como eje central una huelga general sin servicios mínimos, la nueva tanda de episodios refleja los problemas por los que pasa el Hospital Joaquín Sorolla, el ficticio centro de Valencia en el que se ambienta la serie, tras la privatización de su gestión. "La sanidad debe ser pública siempre", proclama el propio Montero que en esta nueva entrega ha querido "alertar y condenar" lo que "está pasando en muchos hospitales en España".
"Nuestros médicos siguen siendo funcionarios públicos, lo que pasa es que la gestión del hospital pasa a manos privadas y eso supone evidentemente un choque, porque es un cambio de cultura y de cómo se aborda todo, de cómo administrar esos recursos, cómo tratas al personal... y eso era lo que queríamos contar", ha explicado el director en una entrevista concedida a Europa Press. "Para nosotros era una manera de alertar y condenar", añade.
Aitana Sánchez-Gijón, que retoma su papel de la primera temporada, señala cómo en la entrega "se privatiza el Sorolla y de repente empiezan a ocurrir cosas como consecuencia de eso". Aunque la actriz expone que "hay sanidad privada que está muy bien, obviamente, cuando tú utilizas los recursos públicos y empiezas a limitarlos y a primar el beneficio económico, a externalizar ciertos servicios", eso tiene consecuencias y "la serie lo plasma".
Otros miembros del reparto coinciden también en que la ficción tiene un posicionamiento claro. Alfonso Bassave expone que 'Respira' "pone el foco en un tema que es importante y que es el de cuidar la sanidad pública" y Najwa Nimri, que "el apoyo de la serie está en la pública".
Precisamente el de Nimri es el único personaje del reparto principal que, en vez de ser médico, es paciente. La actriz da vida a Patricia, una importante política valenciana a la que ya en la primera temporada se le diagnosticaba cáncer de mama y que, en esta segunda, sigue luchando contra la enfermedad. Precisamente el cáncer de mama lleva semanas copando titulares debido a los fallos en los cribados en varias comunidades autónomas, una situación que Montero ha lamentado.
"Fíjate, nosotros arrancamos la primera temporada con una Patricia, una política diciéndole a las mujeres, 'venid a haceros exámenes para prevenir' y es el médico el que dice, 'no vengáis porque estamos saturados'", observa el realizador, comparando esa situación de la ficción un poco con "lo que está pasando" ahora mismo.
"Bueno, ahora no sabemos bien lo que está pasando, ¿no? Porque yo leo opiniones muy confusas sobre lo que está pasando en Andalucía y no me acabo de enterar si es que han desaparecido, si han mentido con los diagnósticos diciendo que eran benignos cuando no... Desde luego está pasando algo y algo que no es bonito y que se tiene que solucionar evidentemente y que es tremendo", puntualiza Montero. "Saber que se han podido morir mujeres por una inoperancia o por no llegar a tiempo o porque el sistema está colapsado, es tremendo, no lo podemos consentir, es horrible", declara.
"YO QUIEREO A UN MÉDICO DESCANSADO"
La serie también muestra el desgaste físico pero sobre todo mental que sufre el personal sanitario, reflejando cómo muchos trabajadores están desbordados y "quemados", con consecuencias para su propia salud, en especial la mental. Y es que, según los resultados del informe MeND (Mental Health of Nurses and Doctors), uno de cada tres profesionales sanitarios en Europa presenta síntomas de depresión o ansiedad. "Esos datos los tenemos, sí. Y hemos hablado con muchos médicos, con muchos enfermeros y es muy triste", afirma Montero, asegurando que 'Respira' también busca denunciar estas díficiles condiciones.
Para el director, "un médico y un enfermero tiene que trabajar sus horas y no tiene que ser un héroe". "Trabajan más horas de las que tienen que trabajar, con más estrés, es horrible, porque nos tienen que curar a nosotros. Yo quiero un médico descansado, un enfermero descansado que hace sus horas, que está bien pagado", reivindica. Manu Ríos, que interpreta a Biel, expone que la ficción puede ser "un recordatorio de cómo de importante es cuidar al que nos cuida".
El actor señala cómo 'Respira' puede ayudar a ver el "lado más humano de los sanitarios". "Cuando se van a sus casas se arrastran todos esos problemas y no dejan de ser personas que están dedicando, por mucha vocación que tengan, muchas horas en un hospital, sacrificando relaciones personales, lidiando con todo esto a la vez que trabajan en un sistema que está muy deteriorado y donde hay una falta muy grande de recursos", reflexiona.
Bassave observa además que "hay muchos profesionales, muchas enfermeras, médicos que dejan la carrera porque no pueden con el coste personal" que supone y que, más allá de abandonar la vida personal o familiar puede ser el entrar "en una depresión" o tener "unos picos de ansiedad" importantes.
PAGAR PARA CURARSE
Para Sánchez-Gijón la salud mental "es uno de los grandísimos problemas que afronta la sanidad pública". "Por suerte, se está empezando a poner el foco también en esto, que era algo sobre lo que ni se hablaba hace apenas dos o tres años y que ha empezado a estar también en el discurso político y en el de los ciudadanos", expone, señalando que, una vez reconocido esto, el siguiente paso es "dotar a nuestra sanidad pública de recursos para atender a la mayoría de la gente que no puede permitirse una atención privada".
La actriz apunta cómo, cuando se tiene "cierta situación económica", no hay mayor problema, ya que se paga "un psicólogo, una terapia psiquiátrica o lo que necesites y está todo solucionado". Sin embargo, quien "no tiene esos recursos" quizá debe "esperar meses para que le den cita a un psicólogo" y como "muchas veces los médicos desbordados no pueden hacer terapias de verdad, pues lo van paliando con una pastillita" lo que deriva en "una sociedad adicta a los antidepresivos".
Más allá de la salud mental y hablando sobre medicamentos y tratamientos de vanguardia, algo que en la ficción queda retratado con la llegada al hospital de una prestigiosa oncóloga, Nimri expone que la ficción refleja algo que ya está ocurriendo: la diferencia entre "ciudadanos de primera" y aquellos que no lo son, es decir, entre "quien se puede pagar curarse y quien no".
DEBUT ACTORAL DE PABLO ALBORÁN
La segunda temporada de 'Respira' cuenta con nuevos fichajes, como el de Pablo Alborán, en lo que es su debut actoral propiamente dicho (ya había aparecido en un episodio de 'Aída' como él mismo). El cantante remarca lo bien que ha sido recibido y la ayuda brindada por sus compañeros.
El artista explica además cómo su faceta musical le facilitó afrontar la interpretación, apuntando que "se recogen muchas emociones" y eso le ha ayudado a "entender a los personajes". "Yo soy muy buen alumno, pero soy muy pesado también. Entonces quería entender dónde llegaba, dónde me iba, qué es lo que pasaba, qué es lo que provocaba la llegada de Jon [su personaje] y la música es un ejercicio maravilloso de empatía, un canal estupendo para conectar con la gente, con las emociones, con lo que te duele, con lo que quieres, con lo que te asusta", expone.
Además de ser creador de la serie, Montero firma el guion junto a Carlos Ruano, Guillermo Escribano, Adela Gutiérrez y Nach Solís y ejerce de productor ejecutivo con Ruano y Diego Betancor. Completan el reparto de 'Respira' nombres como Borja Luna, Blanca Suárez, Xóan Fórneas, Ana Rayo, Macarena de Rueda, Blanca Martínez, Abril Zamora, Marwa Bakhat y Claudia Traisac, entre otros.