Actualizado 10/05/2007 18:55

CELAM.- El Papa saluda a unos 1.200 fieles congregados en el Monasterio de San Bento, donde pernocta en Sao Paulo


SAO PAULO, 10 May. (de la enviada especial de EUROPA PRESS, Laura Caldito) -

El Papa Benedicto XVI pasó la primera noche de su visita a Brasil en el Monasterio de Sao Bento, en el centro de la ciudad Sao Paulo, y esta mañana --antes de partir para el Palacio dos Bandeirantes, donde mantiene un encuentro con el presidente del país, Luiz Inácio 'Lula' da Silva-- unas 1.200 personas, desafiando el mal tiempo, esperaban en las puertas del edificio para verle.

Benedicto XVI decidió entonces, rompiendo el protocolo, asomarse a un balcón y saludar a los congregados. Después, subió a bordo del vehículo blindado que le trasladó al Palacio de los Bandeirantes.

'Lula', que le recibió alrededor de las 11:00 horas hora local (16:00 hora peninsular española), ha manifestado su intención de discutir con el Sumo Pontífice acerca de las políticas sociales puestas en marcha en Brasil.

"Sobre todo, trataré con el Papa las políticas sociales que estamos haciendo en Brasil para que él, como la persona más importante de la Iglesia católica, pueda ayudar a diseminar estas buenas políticas públicas en el mundo, donde la Iglesia católica tiene un papel importante", explicó esta semana el presidente brasileño.

Asimismo, el presidente aseguró que invitará a Benedicto XVI a comprometerse en la lucha contra la pobreza y la exclusión social, como hizo con Juan Pablo II hace años en una carta, aunque no dio más detalles acerca de la invitación. En su discurso de ayer 'Lula' ya agradeció el apoyo del Vaticano en su lucha "contra el hambre y la pobreza".

A mediados de abril, la oficina del presidente informó de que 'Lula' pretendía abordar con el Papa la cuestión del hambre en el mundo, los esfuerzos internacionales para la solución pacífica de los conflictos y la lucha contra la pobreza. Fuentes gubernamentales informaron entonces de que en el encuentro no se tratarían cuestiones de política interna de Brasil, dado que se trata de una visita pastoral y no un viaje de Estado.

OBLITERACIÓN DEL SELLO CONMEMORATIVO DE SU VISITA.

Después de entrevistarse con 'Lula', el Papa participará en una ceremonia de obliteración del sello conmemorativo de su visita a Brasil. Posteriormente, Benedicto XVI volverá al Monasterio de Sao Bento, donde mantendrá un encuentro con representantes de otras iglesias cristianas y de las comunidades judía y musulmana.

Entre los representantes de las diferentes comunidades cristianas estarán el pastor luterano Carlos Moller, presidente del Consejo Nacional de Iglesias Cristianas en Brasil (CONIC), del que también forman parte las Iglesias católica, luterana y anglicana. Las iglesias pentecostales, como la Iglesia Universal del Reino de Dios y Renacer en Cristo no participan en el CONIC, y no estarán presentes en el encuentro ecuménico.

En el monasterio el Papa almorzará con la Presidencia de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB, en sus siglas en portugués) y con miembros de la comitiva del Vaticano. Después, mantendrá encuentros con el gobernador del estado de Sao Paulo, José Serra, con el alcalde de la ciudad de Sao Paulo, Gilberto Kassab, y con el cardenal don Paulo Evaristo Arns.

El acto culminante de la jornada será el encuentro con los jóvenes que protagonizará el Sumo Pontífice en el estadio de fútbol de Pecaembú. Un total de 40.000 jóvenes procedentes de 204 diócesis de Brasil y representantes de Argentina, Uruguay, Chile, Paraguay, Perú, Honduras y Mexico.

Se espera que sean hasta 1.000 los participantes provenientes de otros países. Además, unos 300.000 jóvenes podrán seguir la celebración desde el exterior del estadio, mediante los paneles que se han instalado en la plaza Charles Müller.