SAN JOSÉ, 7 Jun. (Notimérica) -
El mundo vive inmerso en una crisis migratoria que no solo está afectado a Oriente y Europa: cientos de africanos han abandonado su hogar en busca de una mejor vida en Estados Unidos.
Sin embargo, los ciudadanos procedentes de regiones como Burkina Faso, Bangladesh, Camerún o Congo, se encuentra con la 'puerta cerrada' cuando tratan de llegar a Nicaragua tras pasar por Costa Rica, lo que ha provocado las solicitudes de refugio se dispararan hasta en un 300 por ciento en los últimos meses.
Así lo asegura la Dirección General de Migración y Extranjería costarricense, quien informa que, entre marzo y abril, 92 congoleños pidieron refugio. En los primeros cuatro meses, lo hicieron 22 bangladesíes.
"En 2012 recibíamos entre 70 y 100 solicitudes de refugio por mes. Este año, recibimos entre 370 y 400 solicitudes. En algunos meses, superando estas cifras", explicó el coordinador de la Unidad de Refugio, Allan Rodríguez.
Durante los primeros cuatro meses de 2016, la mayoría de peticiones procedían de Iberoamérica. En concreto, de países como El Salvador, Cuba o Colombia. Sin embargo, las solicitudes de africanos se han disparado en los últimos meses.
Según el funcionario, los salvadoreños huyen de la violencia infundada por las maras. "Hacen la migración sur-sur y Costa Rica representa una zona segura para plantear una solicitud de refugio", explicó en declaraciones recogidas por 'CRHoy'.
"Con respecto a otras nacionalidades, como gente del Congo o Bangladesh, hablamos de personas que se presentan a la frontera y tendiendo lograr un plazo por territorio nacional activaron los protocolos de protección. Casi todas se manifestaban infundadas, porque solicitaban refugio e indicaban que era para continuar a EE.UU", agregó Rodríguez.
Este problema se agudizó cuando Nicaragua, limítrofe con Costa Rica al norte, cerró su frontera impidiendo el paso a miles de cubanos que trataban de llegar a Estados Unidos.
Las impetuosas gestiones atan de manos a Migración. Hay una capacidad limitada que -incluso- está desbordada desde otros años.
"Para 2012 esos números superaban la capacidad de la institución de responder de forma oportuna. Se va generando una mora importante en la resolución de las solicitudes y elevamos la preocupación ante algunas autoridades", precisó Rodríguez.
Junto con la Agencia de las Naciones Unidas para Refugiados (ACNUR), Migración organizó un plan para agilizar la tramitación de solicitudes en los próximos 7 meses. "La meta es que a final de año quede en cero la mora", concluyó.