BUENOS AIRES, 8 Ene. (Notimérica) -
Argentina continúa conmocionada por la muerte este miércoles de Néstor Femenía, un niño de 7 años que falleció en la provincia del Chaco como consecuencia de la desnutrición que padecía.
La muerte del pequeño, que pesaba tan solo 20 kilos y además padecía tuberculosis, ha puesto de manifiesto una vez más los problemas que tiene el país para garantizar el Estado de Bienestar para todos sus ciudadanos.
Femenía vivía en el Chaco, una región al norte del país conocida por ser una de las más pobres de América Latina. Era de origen qom, una tribu aborigen que habita en esa zona. Días antes de su fallecimiento ingresó en el hospital Avelino Castelán de Resistencia, la capital de la provincia.
Allí "se siguió el protocolo previsto por la OMS para el tratamiento de pacientes con tuberculosis", según aseguró a Diario Chaco la directora del hospital, Alicia Michelini, que afirmó que, si bien la tuberculosis pudo ser la causa última de la muerte, el pequeño "evidentemente" tenía "una desnutrición de base que es lo que motivó toda la complicación posterior".
Tras conocerse la noticia, desde el Centro de Estudios e Investigación Social Mandela, fuente de consulta para distintas organizaciones sociales, económicas y políticas de la Provincia del Chaco, aseguraron que "la muerte de Néstor sintetiza y patentiza, con exactitud y objetividad, la profunda injusticia social instalada en la comunidad chaqueña".
Además, su coordinador, Rolando Núñez, denunció que "este fallecimiento nos interpela a todos y pone al descubierto como se gobierna en Chaco y en Argentina". "Este fallecimiento responsabiliza a los dos gobiernos", añadió.
EL FALSO 'HAMBRE CERO'
Para la FAO, la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, se considera que se encuentran en una situación de 'hambre cero' aquellos países que no superan el 5% de habitantes con desnutrición; situación en la que se encontraría Argentina de acuerdo con un informe de 2012 de la organización. En cambio, son muchos los médicos y ONG's del país que llevan años denunciando que la FAO se ha basado en estadísticas del Gobierno que no son fiables.
Pese a ser cierto que en los últimos diez años la situación de hambre se ha reducido considerablemente (en 2003 fallecieron por esta causa 1.787 personas frente a las 891 de 2013), un informe emitido por el propio Ministerio de Salud del país el año pasado asegura que en Argentina cada día mueren dos personas por enfermedades derivadas de la desnutrición.
El informe resalta que en más del 70% de los casos se trata de muertes de hombres y mujeres mayores de 75 años, pero aunque todas las muertes por este motivo generan gran indignación y preocupación entre los argentinos, cuando se trata de niños ésta es aún mayor.
Y mayor aún, si cabe, cuando se recuerdan las palabras de la presidenta de la nación, Cristina Fernández de Kirchner, que hace un año aseguraba que no cree que haya "ningún argentino que se muera de hambre".
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Tras la muerte de Femenía se ha reabierto el debate sobre la situación y los ciudadanos llevan desde este miércoles haciendo patente su indignación a través de las redes sociales, en las que no han dudado en acusar de "asesinos" tanto a la presidenta como al que ahora es su jefe de Gabinete, Jorge Milton Capitanich, que gobernó el Chaco entre 2007 y 2013.