SAN JOSÉ, 14 Abr. (Notimex/Notimérica) -
El Gobierno de Costa Rica ha culpado a Estados Unidos de ser uno de los principales estimuladores de la crisis migratoria que se vive en la región, después de que cerca de 1.300 cubanos ingresaran a su territorio por la frontera de Panamá en su camino hacia el país norteamericano.
El incidente corre el riesgo de reactivar la reciente crisis en la cual miles de cubanos dispuestos a llegar a Estados Unidos, que les concede una serie de beneficios migratorios bajo el amparo de la Ley de Ajuste Cubano, quedasen atrapados en Costa Rica.
El Gobierno de Luis Guillermo Solís lo calificó como ingreso "violento", que ocurre un mes después de que Costa Rica diera por solucionada la crisis migratoria que la obligó a atender a unos 8.000 cubanos y a encauzarlos hacia Estados Unidos.
"Se enviará una carta al presidente Barack Obama para expresar el repudio de Costa Rica a la vigencia de la normativa estadounidense, que alienta a los migrantes a continuar un peligroso tránsito hacia ese país", indicó el canciller costarricense, Manuel González.
El ministro se reunió de forma urgente con el presidente Solís para evaluar el ingreso ilegal y violento de centenares de cubanos por la frontera sur, en Paso Canoas. A la cita asistieron el ministro de seguridad, Gustavo Mata, y la directora de Migración, Kattia Rodríguez.
La Fuerza Pública tuvo que presionar a los poco más de 1.300 migrantes, la mayoría de ellos cubanos, aunque también había asiáticos y africanos, que ingresaron este miércoles, de forma ilegal, a suelo costarricense por la frontera sur.
La mayoría fue desalojada pacíficamente a las inmediaciones del puesto fronterizo de Paso Canoas, en Ciudad Neily, pero otros 120 se negaron a salir, y esto obligó a los oficiales a acordonar la zona hasta obligarlos a regresar a Panamá.
Islán Reyes, un profesor de Educación Física que cruzó la frontera de manera ilegal, explicó que la movilización fue una forma de presión a los gobiernos del Istmo para que los ayuden a concluir su peregrinaje hasta Estados Unidos.
"Fuimos hasta la parte de Costa Rica manifestando el deseo de seguir hacia delante para que todos los gobiernos de Centroamérica vean que somos nosotros, porque muchos nos ven como migrantes, que somos exiliados, que vamos en busca de libertad", expresó.
Por otro lado, el periódico panameño 'La Estrella' señaló que hay cerca de 3.000 inmigrantes cubanos que intentan llegar a Estados Unidos, los cuales viven en cuatro refugios en la provincia de Chiriquí, después de que Costa Rica dejase de recibirlos en diciembre de 2015.
Los cubanos intentan llegar a Estados Unidos para aprovechar la vigencia de la Ley de Ajuste Cubano, la cual establece que cualquier ciudadano de esa isla que ponga un pie en suelo estadounidense debe ser acogido y puede optar por la residencia un año después.