Actualizado 15/07/2010 21:24

Crónica Argentina.- Argentina se convierte en el primer país de América Latina en aprobar el matrimonio homosexual

Los gays podrán ahora adoptar niños como pareja legalmente constituida

BUENOS AIRES, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -

Argentina se convirtió este miércoles en el primer país de América Latina en introducir en su derecho civil el matrimonio entre personas del mismo sexo con la aprobación en el Senado de una histórica ley federal, después de 15 horas de debate en el pleno, de tres meses de discusión en comisión y de tres años de campaña de la comunidad gay.

Esta decisión podría profundizar la pugna que mantiene con la Iglesia Católica el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, que ha visto este hecho como "un paso positivo que defiende el derecho de la minoría" y que ha criticado, a su vez, el hecho de que "se hablase de guerra de dios".

Cientos de personas permanecieron durante más de 16 horas a las puertas del Senado pese a las bajas temperaturas que se registraron en Buenos Aires. Todas ellas mostraban pancartas a favor y en contra de la controvertida ley, a la espera de la decisión histórica que finalmente favoreció a las organizaciones de gays y lesbianas que durante años exigieron el reconocimiento legal de sus uniones, propuesta que siempre contó con el apoyo del actual gobierno.

La extensa sesión estuvo marcada por las incógnitas hasta el último momento sobre el resultado final de las votaciones, sobre todo porque los senadores votaron en conciencia y al margen de las disciplinas de partido. A las 04.00 horas (09.00 horas en la España peninsular), el proyecto de ley se impuso por 33 votos a favor, 27 en contra y tres abstenciones.

La noticia de que en Argentina los homosexuales podrán contraer matrimonio en el marco del Código Civil hizo estallar en lágrimas no sólo a los gays y lesbianas que esperaban fuera de la sede parlamentaria, sino también a algunos senadores que festejaron este hecho inédito. "Es un trabajo de mucho tiempo y estoy muy contento. Argentina está un poquito mejor", expresó el legislador Ricardo Cuccovillo, quien hace unas semanas afirmó tener un "hijo gay que es igual a todos los demás".

La presidenta de la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales (LGBT), María Rachid, celebró la decisión de los senadores que dieron el visto bueno a la "ley por la que tanto hemos luchado". "Hoy somos una sociedad más justa, más democrática y eso es algo que tenemos que festejar todos porque nos hace mejor a todos y todas", dijo en declaraciones citadas por la prensa local.

La iniciativa ordena una modificación del Código Civil para que se sustituya la fórmula de "marido y mujer" por la expresión "contrayentes" y establece que se deben igualar los derechos de las parejas homosexuales y las heterosexuales, incluso en aspectos tales como la adopción, la herencia y los beneficios sociales.

De esta manera, Argentina se convierte en el único país de la región en avalar el matrimonio gay y el décimo en el mundo después de Países Bajos, Bélgica, España, Canadá, Sudáfrica, Noruega, Suecia, Portugal e Islandia. En el conjunto de América Latina sólo se reconocen las uniones civiles --que conceden derechos más o menos amplios-- entre personas del mismo sexo en Uruguay y Colombia. El matrimonio homosexual es legal en Ciudad de México, pero no en el resto del país.

DEBATE

El matrimonio entre homosexuales ha sido uno de los pocos asuntos en los que Fernández de Kirchner no consiguió pleno apoyo de los legisladores de su coalición en el Congreso. Algunos de ellos habían dejado claro en un principio su rechazo a esta normativa alegando desde razones religiosas hasta fisiológicas.

"El matrimonio entre un hombre y una mujer ha existido durante siglos y es esencial para perpetuar la especie", afirmó el senador oficialista Juan Pérez Alsina, durante su intervención en el Senado en la que reiteró su oposición al proyecto de ley.

En cambio, los senadores que avalaron la propuesta ven en esta decisión una forma de reivindicar los derechos de todos los ciudadanos. "Lo que nos define es nuestra humanidad y lo que va contra la humanidad es intolerancia", aseveró la parlamentaria oficialista Norma Morandini.

CONFRONTACIONES CON LA IGLESIA

Pero el debate más encarnecido lo libraron el Ejecutivo de Fernández de Kirchner y la Iglesia Católica, el cual se radicalizó aún más cuando se dio a conocer que el controvertido proyecto permitirá a las parejas de homosexuales adoptar niños y optar por el método de la fertilización asistida.

En Argentina existe la paradoja de que todas las personas solteras pueden adoptar niños sin importar su orientación sexual, lo que ha permitido a gays y lesbianas tener la custodia del niño sin la necesidad de que se formalice un matrimonio. En el caso de que estén en pareja sólo uno de ellos tendrá la patria potestad. La nueva legislación abre la puerta a que los homosexuales puedan adoptar ahora como matrimonio legal y constituido.

El hecho de la adopción ha sido el punto que ha provocado un mayor rechazo por parte del clero, más que la unión legal en sí. El arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio, pidió tener "cuidado de que, tratando de anteponer y velar por un pretendido derecho de los adultos dejemos de lado el prioritario derecho de los niños a contar con modelos de padre y madre, a tener papá y mamá".

El tema del matrimonio gay ha despertado también confrontaciones en el seno de la Iglesia en Argentina después de que fuese suspendido el sacerdote José Nicolás Alessio por haber expresado su apoyo al proyecto de ley. "Me siento en comunión con Dios, con mi gente y con el Evangelio, más allá de que a un obispo o al Papa se le ocurra excomulgarme", dijo el párroco que ha sido sometido a un juicio canónico ante el Tribunal Interdiocesano de la provincia argentina de Córdoba (centro).

Fernández de Kirchner, por su parte, ha afirmado hoy desde China, donde realiza una visita oficial, que "el hecho de que se hablase de guerra de dios, por ejemplo, mostraba una radicalización que no resultaba positiva de ninguna manera", al rechazar nuevamente el "discurso que rodeaba el debate" sobre los matrimonios entre personas del mismo sexo.

En diciembre, nueve parejas del mismo sexo obtuvieron un permiso judicial en Argentina para concretar su unión a través de los registros civiles, pero algunos fueron anulados sin que hasta el momento se haya resuelto su apelación. Se espera que con la entrada en vigor de la reforma del Código Civil este asunto quede zanjado definitivamente y se les reconozca legalmente su unión.