MADRID, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
El diario oficial 'Guerrillero' publicó un artículo en el que aboga por una reconciliación entre los cubanos residentes en la isla y los emigrados, un hecho inusual en ese país donde el régimen comunista que gobierna desde hace más de 52 años siempre ha visto a los nacionales exiliados como unos "desertores".
'Guerrillero', un diario de la provincia de Pinar del Río (este), dedica un extenso artículo titulado 'Jóvenes y emigración: Cuba somos todos' a hablar sobre aquellos que tuvieron que abandonar la isla "con el objetivo de mostrar otra imagen del emigrado". Los entrevistados son personas de entre 22 y 30 años que viven en países como Italia, Chile, Canadá, Ecuador, España, México y Estados Unidos.
El rotativo reconoce que "durante décadas no era bien visto el ser emigrado" y que "la postura asumida" por aquellos que abandonan Cuba "constituye una de las más controvertidas de su existencia". Pero aclara que aunque se haya "estigmatizado a las personas emigrantes de la isla como desertores", la realidad es que "muchos de estos jóvenes sienten este país tan suyo como los de adentro".
"En la isla hay personas que no los consideran cubanos y en sus países actuales de residencia, no pasan de ser 'simples inmigrantes', la capa social 'más baja'", señala el artículo en un intento por explicar la realidad de los que viven en el exterior.
"Pero en todos los casos persiste el interés de fórmulas de reconciliación entre quienes por diversas razones decidieron echar suerte en otros rincones del mundo y los que permanecen en la nación", señala la nota.
El rotativo --de corte oficial como todos los medios en la isla-- considera que "ser cubano no admite fronteras físicas ni psicológicas" porque "amar a Cuba, tenerla como patria no necesita de un espacio geográfico". "No se puede limitar la identidad porque se han escogido caminos diferentes y se ama a Cuba desde variadas maneras", resalta.
Pero 'Guerrillero' hace una evocación interesante de José Martí, uno de los mayores símbolos de ese país, al destacar que se va "en contra de esencias martianas, cuando segregamos por la elección de residir fuera de la isla" porque "patria es humanidad".
"En nosotros, principalmente los jóvenes, como constructores actuales de la revolución, está la oportunidad de comenzar el proceso de normalización de las relaciones entre el pueblo cubano que vive dentro y fuera de Cuba, después de todo, es el mismo pueblo", concluye el artículo.
Se estima que más de un millón y medio de cubanos viven fuera de la isla, la mayoría en Estados Unidos, país donde han conformado una de las comunidades de cubanos más sólidas del mundo gracias al apoyo de Washington, el principal enemigo del gobierno de los hermanos Fidel y Raúl Castro.
El viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Dagoberto Rodríguez, se refirió en enero de 2010 a la situación de los connacionales que viven fuera de la isla y aseguró que "no existen problemas de fondo entre Cuba y la mayoría de sus emigrados".
"La relación de la nación con la inmigración es precisamente el diálogo directo sin intermediarios con aquellos, que son mayoría, que apoyan la lucha del pueblo cubano contra el bloqueo y aceptan la independencia del país", dijo.