CIUDAD DE MÉXICO, 2 Jun. (Notimérica) -
Según organismos internacionales el aumento de los desastres climáticos en Iberoamérica representa un 70 por ciento de sus emergencias en la región, por lo que se busca impulsar debates socioambientales para profundizar sobre las posibles causas y desarrollar planes de contingencia para evitar muertes y destrucciones territoriales.
La explicación que dio la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), junto con otras instituciones, es que la variabilidad climática incrementará la frecuencia y magnitud de los desastres.
Es decir, los patrones de precipitación están cambiando, las temperaturas están aumentando y los fenómenos meteorológicos presentan cambios, como las lluvias intensas. Los impactos van desde el derretimiento de los glaciares andinos hasta devastadoras inundaciones y sequías. Los dos océanos que rodean el continente --el Pacífico y el Atlántico-- se están calentando y acidificando a medida que aumenta el nivel del mar.
Según el Índice de Riesgo Climático Global, durante el período de 1996 hasta 2015 tres de los 10 países más afectados en el mundo pertenecen a Iberoamérica: Honduras (que encabeza el ranking), Nicaragua y Guatemala.
México es uno de los países que recientemente ha sufrido un deslave por la tormenta tropical 'Beatriz' dejando al menos dos muertos, dos heridos y daños en carreteras y viviendas.
Por otro lado, Perú enfrentó entre marzo y abril de este año inundaciones y deslizamientos a causa de los fenómenos de 'El Niño' y 'El Niño Costero' --los cuales se producen por el calentamiento de las aguas del litoral--, provocando más de 100 muertos, un millón de personas afectadas, 7.000 productores rurales damnificados y varios daños en infraestructuras.
Asimismo, los peruanos también han tenido que ver cómo las lluvias han perjudicado más de 60.000 hectáreas de sus tierras.
Colombia ha sufrido el desbordamiento de tres ríos por causa de las fuertes lluvias afectando de lleno al municipio de Mocoa, donde ha dejado 273 fallecidos, otros 262 heridos y alrededor de 45.000 afectados según la Cruz Roja.
En Ecuador las lluvias provocaron 34 muertes desde inicios del 2017. La época invernal afectó a 140.300 personas y 32.000 casas, por lo que ha día de hoy hay 1.880 damnificados, según el reporte de la Secretaría de Gestión de Riesgos de ese país.
Entre 2003 y 2013, la FAO estima que el 22 por ciento de las pérdidas y daños causados por desastres de mediana y alta intensidad en países del Sur afectaron al sector agrícola.
Esta situación preocupa a la región que es una de las principales productoras de alimentos a nivel mundial. El sector, del que depende prácticamente un tercio de la población latinoamericana activa, sufrió el 13 por ciento de los daños causados por desastres.
Finalmente, la FAO y la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres ayudan a la región a desarrollar la Estrategia Regional de Gestión del Riesgo de Desastres en el sector agrícola y la seguridad alimentaria y nutricional en favor de la comunidad iberoamericana.