MADRID 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
El desayuno es una de las comidas más importantes del día, pero no todos los desayunos son iguales. Muchas personas recurren a opciones aparentemente inofensivas, como un café con galletas o bollería industrial, sin darse cuenta de que están comprometiendo su energía para el resto de la mañana. Este tipo de alimentos, cargados de azúcar y grasas, provocan un aumento rápido de glucosa en sangre, seguido de un drástico descenso que deja una sensación de fatiga y hambre.
Según el Tiktok de @manuelvisothedoc, médico y divulgador científico, este tipo de desayuno es como prender un fuego con papel: arde rápidamente, pero se apaga igual de rápido, dejando a la persona sin energía. Un desayuno adecuado debe ser equilibrado, con alimentos que ofrezcan saciedad prolongada y energía constante. Sin embargo, muchas opciones populares como las tostadas de pan blanco con margarina o mermelada, o los cereales de caja azucarados, son ricos en harinas refinadas y azúcar, lo que genera picos de azúcar seguidos de bajones de energía. A pesar de parecer opciones saludables, estos alimentos pueden tener el efecto contrario al deseado. EL IMPACTO DE LOS DESAYUNOS CARGADOS DE AZÚCAR Y GRASAS
Consumir alimentos ricos en azúcar y grasas no solo afecta los niveles de energía, sino que también puede generar otros problemas de salud a largo plazo, como el aumento de peso, la resistencia a la insulina y la desregulación hormonal. Los cereales azucarados y la bollería industrial, por ejemplo, no solo aportan calorías vacías, sino que también alteran la regulación de la glucosa en sangre, causando fluctuaciones que pueden generar irritabilidad y dificultad para concentrarse. Según expertos en nutrición, un desayuno bien equilibrado debe incluir proteínas, fibra y grasas saludables para evitar estos efectos y mantener niveles estables de energía durante toda la mañana.
Por lo tanto, elegir el desayuno adecuado no solo mejora la productividad y el bienestar general, sino que también tiene un impacto directo en la salud a largo plazo. Evitar alimentos con un alto contenido de azúcares refinados y grasas trans es fundamental para mantener un nivel de energía constante y evitar el temido "bajón" de media mañana.
DESAYUNOS QUE MANTIENEN LA ENERGÍA DURANTE TODO EL DÍA
En lugar de optar por alimentos procesados y azucarados, es recomendable elegir opciones naturales que aporten los nutrientes necesarios para empezar el día con fuerza. Algunas alternativas incluyen avena con frutas frescas y nueces, yogur natural con semillas y frutos secos, o huevos revueltos con espinacas y aguacate. Estos alimentos son ricos en proteínas, fibra y grasas saludables, lo que ayuda a mantener los niveles de glucosa en sangre estables, proporcionando energía de manera sostenida.
Como se menciona en el Tiktok de @manuelvisothedoc, la clave está en evitar las opciones que aumentan rápidamente el azúcar en sangre y apostar por desayunos que mantengan la saciedad y el bienestar durante varias horas.