MADRID 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los grifos del baño y la cocina suelen acumular fácilmente huellas, marcas de agua y restos de cal. Aunque los limpies con frecuencia, a menudo en cuestión de horas vuelven a aparecer, dejando un aspecto descuidado que desespera a más de uno.
En redes sociales circulan múltiples trucos caseros para mantener el brillo del acero inoxidable, pero hay uno especialmente simple y rápido que se ha vuelto muy popular: un tip de la experta en limpieza Yolanda Herrera (@yolandavaquitayoli) que promete dejar los grifos impecables y libres de marcas durante más tiempo.
CÓMO APLICAR EL TRUCO PASO A PASO
El consejo es sencillo: primero limpia tu grifo como de costumbre y sécalo bien con un paño. Una vez esté completamente seco, frota una vela (la cera) por las zonas donde suelen quedar huellas y goterones y, después, vuelve a repasarlo con una esponja suave o un estropajo que no raye la superficie. Finalmente, sécalo de nuevo.
La clave está en que, tras este proceso, el agua resbala por la superficie en lugar de quedarse adherida, lo que evita que se marquen las gotas y las huellas.
La diferencia se aprecia enseguida: las gotas de agua se deslizan sin dejar rastro y el grifo se mantiene brillante durante más tiempo. Incluso si apoyas las manos sobre él, apenas quedan marcas visibles.