Actualizado 07/05/2017 18:15

Detenida una monja en Argentina por facilitar abusos sexuales a niños

Federal police officers guard the entrance of the Federal Authority of Audiovisu
ENRIQUE MARCARIAN, REUTERS

   BUENOS AIRES, 7 May. (Notimérica) -

   Una monja japonesa, Kosaka Kumiko, ha sido detenida en Argentina acusada de encubrir diversos casos de abusos sexuales y violaciones de menores sordos por parte de los sacerdotes del Instituto Provolo de Menzona, donde todos trabajaba.

   El caso ha sido descubierto tras la denuncia de varios menores víctimas de violaciones, quienes declararon en contra de los religiosos. El abogado defensor de las víctimas, Sergio Salinas, ha explicado que "la denuncia de una joven de 17 años, que declaró que fue abusada cuando tenía 5 años y que Kumiko le colocó un pañal para detener la hemorragia que le había generado tras la violación".

   "Soy inocente. No sabía de los abusos. Soy una persona buena que he entregado mi vida a Dios", ha asegurado la monja en su declaración testimonial, según ha afirmado el diario 'La Vanguardia'.

   Otra de las presuntas víctimas de estos abusos sexuales ha relatado cómo la monja la enviaba a la habitación del cura Horacio Corbacho, otro de los detenidos, quien abusaba de ella. Además, una víctima ha asegurado que la monja participaba en estos tocamientos y pedía a las niñas que se tocasen entre ellas. También obligaba a los menores a ver pornografía junto con otro de los implicados, el celador Jorge Bordón.

   Además, uno de los cometidos de esta monja era elegir a los menores más débiles, sobre los que infringían los abusos sexuales, así como ocultarlos. Diversos testimonios han apuntado a que esta escondía el sangrado de los niños poniéndoles pañales.

   Tras la denuncia de los implicados, Kumiko huyó de las autoridades, y tras un mes como prófuga, se entregó en una comisaría de Buenos Aires.

   Junto con esta monja, otros cinco hombres han sido detenidos --dos curas y tres empleados--. Uno de ellos, el sacerdote que dirigía la institución, Nicolás Corradi, arrastraba denuncias por abusos sexuales a menores desde 1984en Italia, por lo que fue trasladado a Argentina, con el fin de encubrir estos delitos.