MÉXICO DF, 6 Ago. (Notimérica) -
Uno de los presuntos asesinos del fotoperiodista Rubén Espinosa y de cuatro mujeres, detenido este miércoles, ha confesado haber participado en los crímenes, según publicaron medios locales.
El presunto implicado, de 42 años de edad, es un ex convicto que estuvo diez años en el Reclusorio Norte por delitos de violación, robo y lesiones.
Asimismo, el detenido exigió a las autoridades que no se filtrara su nombre a los medios de comunicación, así como la intervención de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito General y un abogado.
HUELLAS ENCONTRADAS EN EL APARTAMENTO.
Su captura fue confirmada por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal tras encontrar una de sus huellas digitales en el apartamento donde se cometió el crimen, tal y como informó el diario mexicano 'El Universal'.
Previamente, la Procuraduría difundió un vídeo en el que se ve a tres hombres --los presuntos asesinos-- saliendo del edificio en el que se encontraba el apartamento. Uno de ellos se subió en un vehículo de alta gama, otro salió con una maleta y caminó hacia una esquina, mientras que el tercero abandonó el lugar cinco minutos después.
LAS VÍCTIMAS FUERON TORTURADAS.
Según las informaciones a las que ha tenido acceso la Oficina en México del Alto Comisionado de la ONU, las cinco víctimas "tenían marcas de tortura que incluían violencia sexual". En este contexto, insta a las autoridades mexicanas a "investigar a fondo" el crimen y "reforzar la protección de periodistas y defensores de los Derechos Humanos en México".
El periodista Rubén Espinosa trabajaba generalmente en el estado de Veracruz para la revista 'Proceso' y la Agencia Cuartoscuro. En las últimas semanas, había denunciado públicamente una serie de amenazas y hostigamiento que lo habían forzado a desplazarse al Distrito Federal en busca de protección.
La Oficina en México del Alto Comisionado ha recordado que en el estado de Veracruz han sido asesinados once periodistas desde el año 2010 y advierte de que "esta clase de crímenes violan la libertad de expresión e inhiben el ejercicio del periodismo en el país".
Junto al fotoperiodista se encontraba sin vida la estudiante y activista de Derechos Humanos Nadia Vera, que ha sido sepultada este miércoles, y otras tres mujeres más --una de ellas de nacionalidad colombiana--.