Actualizado 19/04/2018 11:17

Las dificultades de vivir siendo el joven con más sobrepeso de Colombia

Didier Silva
YOUTUBE / GORDITOS DE CORAZÓN

   BOGOTÁ, 18 Abr. (Notimérica) 

   El joven con el mayor problema de sobrepeso de Colombia, Didier Silva, lleva desde los 12 años sin poder andar y ha estado a punto de perder la vida por un problema de corazón.

   Silva, que ahora tiene 22 años, vive desde que era niño con su abuela en una humilde casa en Mosquera, en el departamento de Nariño. Todo su barrio le conoce debido a su condición especial y a las malas circunstancias económicas de su familia.

   A Silva lo bañan en plena calle, a la entrada de su casa, en muchas ocasiones va desnudo porque no tiene ropa de su talla suficiente y cuando juega con sus amigos, él va sobre una especie de carro que ellos empujan, informa 'Infobae'.

   Además de su exceso de peso, el joven también sufre otro gran número de afecciones relacionadas con él, como hipertensión, diabetes, apnea del sueño, anemia o la atrofia de sus piernas que le impide caminar desde que tenía apenas 12 años. Silva también sufre de problemas de carácter mental como trastorno del aprendizaje o gran agresividad.

   Para mejorar las condiciones de vida y de salud de Silva, la Fundación Gorditos de Corazón, junto con la colaboración de la Fuerza Aérea Colombiana (FAC), los cuerpos de Bomberos de Nariño y Cali, paramédicos, psicólogos y voluntarios aunaron sus esfuerzos para proporcionar al joven el tratamiento que requería estando permanentemente al cuidado de profesionales.

   De esta forma, los implicados consiguieron trasladar a Silva hasta un centro médico donde pudo comenzar a mejorar su vida y su salud. Para lograr su traslado intervinieron numerosas personas e incluso se tuvo que hacer uso de una grúa y un helicóptero.

   Después de cinco meses de tratamiento en el Hospital Universitario del Valle, el joven logró perder casi 50 kilos pero, según 'Blu Radio', los médicos decidieron hacerle regresar porque no se había acostumbrado a su nueva vida. Además, en el hospital los facultativos adaptaron para su movilidad una silla de ruedas que ahora podrá utilizar en casa.

   El viaje de vuelta resultó igual de complicado que el de ida. El joven se trasladó durante una hora y media de viaje por carretera, después fue sedado y subido a un helicóptero tipo Black Hawk de la FAC que lo llevó hasta Mosquera.

   Allí, fue recibido este lunes por amigos, vecinos y familiares quienes lo saludaron entre vítores y aplausos deseando que su situación siga mejorando en un futuro.