Actualizado 17/10/2018 09:59

El 'doodle' que recuerda a Chiquinha Gonzaga, la música brasileña que rompió barreras como mujer y como artista

CHIQUINHA GONZAGA
GOOGLE

   BRASILIA, 17 Oct. (Notimérica) -

   El 'Gigante de Internet' celebra este miércoles el 171 cumpleaños de Francisca Edwiges Neves Gonzaga, más conocida como Chiquinha Gonzaga, célebre artista musical de Brasil y una de las figuras más importantes de la historia del país sudamericano.

   Nacida en Río de Janeiro en 1847, Chiquinha Gonzaga mostró una afinidad por la música desde la infancia: comenzó a tocar el piano con 11 años y estudió música con el maestro Elias Álvares Lobo, recuerda Google, buscador que ha creado para este día un 'doodle' en honor a la brasileña.

   Cuando Gonzaga tenía 16 años, sus padres insistieron en que su hija contrajera matrimonio, un enlace que fue concertado y que terminó cuando el oficial de la Marina Imperial brasileña Jacinto Ribeiro do Amaral, marido de Gonzaga, la obligó a trabajar con él y dejar la música. La artista se había quedado embarazada al poco tiempo de contraer matrimonio, y posteriormente tuvo otros dos hijos más.

   En un momento en que las mujeres independientes enfrentaban una gran presión social, Gonzaga sacrificó todo para seguir sus ambiciones musicales y se separó de Ribeiro. Solo pudo llevarse consigo a su hijo mayor, pues su entonces ex-esposo le negó poder quedarse con los más pequeños: Maria do Patrocínio e Hilário.

   A pesar de la pena por mantenerse alejada de sus dos hijos pequeños y de sufrir el repudio de la sociedad por se una mujer separada, Chiquinha Gonzaga se convertiría en la primera mujer conductora de orquesta en América del Sur y en una de las figuras más importantes de la historia de la música brasileña.

   Para una mujer ganarse la vida como músico profesional en el Brasil del siglo XIX era algo inaudito, pero Gonzaga persistió, componiendo 77 operetas y más de 2.000 canciones. 'Atraente', publicada en 1881, puede ser su composición más querida, marcando el comienzo de un sonido que se conocería como "choro". Con sus habilidades de piano sin igual y su don para la improvisación, Gonzaga fue pionera en esta mezcla optimista de jazz, vals, polka, y ritmos afro-brasileños.

   El 17 de enero de 1885, Gonzaga debutó como directora de orquesta con su pieza, 'Palhares Ribeiro, A Corte na Roça'. A pesar de la popularidad de su música, Gonzaga enfrentó la resistencia como mujer en un negocio dominado por hombres. A menudo actuando con un grupo encabezado por su amigo cercano, el flautista Joaquim Antônio da Silva Callado Jr., e incluyendo a su hijo João Gualberto en clarinete, Gonzaga logró prosperar frente a la adversidad, inspirando a otros a seguir sus pasos.

   A fines de la década de 1880, Gonzaga apoyó al movimiento abolicionista, vendiendo sus partituras para recaudar fondos, pagó la libertad del esclavizado músico Zé Flauta. Su marcha de carnaval de 1899 '¡O abre, ay!' fue un homenaje a la libertad. En 1917, fue cofundadora de la sociedad de derechos de los artistas SBAT para garantizar que los compositores recibieran una parte justa de los ingresos de sus composiciones.

   El legado de Gonzaga sigue siendo una de las leyendas musicales más célebres de Brasil. De hecho, el cumpleaños de Gonzaga es ahora el Día Nacional Oficial de la Música Popular brasileña (Dia da Música Popular Brasileira).