QUITO, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
Sobrevivientes de la represión política de Ecuador entre 1981 y 1988 acusan a los medios de comunicación privados del país latinoamericano de ser cómplices por silenciar las violaciones a los derechos humanos.
"Sufrimos persecución, difamación, malversación de parte de los medios de comunicación. Nuestras familias sufrían mucho cuando aparecíamos como asaltantes de bancos y delincuentes", declaró Miguel Jarrín, miembro de la organización 'Alfaro Vive Carajo (AVC)'.
En la etapa inicial del entonces presidente León Febres Cordero, "los medios de comunicación apoyaban su candidatura, mostraban de manera disimulada la alegría por la victoria de Febres Cordero", ha declarado el defensor de Derechos Humanos, Alexis Ponce y la agencia de noticias ANDES.
La segunda etapa estuvo marcada por una posición crítica, "los crímenes eran demasiado escandalosos para ocultarlos", declaró Ponce.
Por su parte, el cantautor Jaime Guevara, quien ha vivido en carne propia la tortura aseguró que "es innegable que gran parte de la prensa respaldara las formas de gobernar de Febres Cordero".
La hermana de otro miembro asesinado de AVC, Lilian Vásconez, ha comentado que "los medios ponían lo que ellos querían".
Los medios de comunicación ubicaron a los militantes AVC en las páginas policiales y de crónica roja, obviando las motivaciones y el accionar político de la organización.