Publicado 09/10/2013 04:40

EEUU.- La crioterapia es efectiva para reducir el dolor después de algunos tipos de operaciones

Intervención quirúrgica, operación, quirófano
RIBERA SALUD

MADRID/ATLANTA, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -

Nuevas combinaciones de tratamiento del dolor postoperatorio logran disminuirlo, así como reducir el uso de analgésicos narcóticos, según dos estudios presentados esta semana en el Congreso Clínico 2013 del Colegio Americano de Cirujanos y publicados en 'Journal of the American College of Surgeons'.

Estas terapias consisten en la simple pero no estándar aplicación de bolsas de hielo después de operaciones abdominales importantes en pacientes y un método de administración prolongada de lidocaína utilizando la nanotecnología en los animales.

Investigaciones anteriores han demostrado que el dolor postoperatorio suele ser tratado de forma deficiente. La terapia estándar para el dolor después de la mayoría de las operaciones más importantes son los narcóticos, también llamados opioides, como la morfina, pero estos medicamentos tienen muchos posibles efectos secundarios, como somnolencia o estreñimiento, y cuando se usan a largo plazo, existe riesgo de dependencia.

"Un creciente cuerpo de evidencia científica demuestra que los narcóticos pueden no ser la mejor manera de controlar el dolor ", afirmó el investigador principal del estudio, Viraj A. Master, profesor asociado de Urología en la Escuela de Medicina de la Universidad de Emory, en Atlanta, Estados Unidos. "Ahora sabemos que es más eficaz utilizar la combinación de tratamientos que reducen la cantidad de estupefacientes", agregó.

Múltiples estudios han encontrado que la crioterapia, aplicación de hielo en la herida quirúrgica, es segura y efectiva para reducir el dolor después de algunos tipos de operaciones, como los procedimientos ortopédicos. Sin embargo, los investigadores no han estudiado el uso de la crioterapia en pacientes sometidos a una gran incisión, como las operaciones abdominales, según Master.

Para el estudio de Emory, los científicos compararon el efecto sobre el dolor postoperatorio de la aplicación de bolsas de hielo de forma suave en la zona de la incisión después de la cirugía abdominal abierta (27 pacientes) frente a la no aplicación de hielo (28 pacientes).

Los individuos de crioterapia se aplicaron compresas de hielo en la herida a intervalos deseados durante al menos 24 horas, además de tener la opción de tomar opiáceos prescritos, mientras que el otro grupo recibió sólo opiáceos para el alivio del dolor.

Dos veces al día, los pacientes valoraron su intensidad del dolor en una escala de ningún dolor (cero) a dolor severo (100). Los resultados mostraron que los pacientes que utilizaron bolsas de hielo informaron significativamente de tener menos dolor que los que no aplicaron hielo las heridas quirúrgicas, con un promedio de un 50 por ciento menos de dolor en el primer y tercer día tras la operación en los individuos en crioterapia frente a los que no tenían este tratamiento.

Además , en el primer día postoperatorio, el grupo de terapia con hielo utilizó un 22,5 por ciento menos de analgésicos opioides que los controles, además de que algunos pacientes que usaban la ciroterapia no usó narcóticos.

Según Master, los cirujanos deben recomendar a los pacientes con cirugía abdominal abierta aplicar intermitentemente compresas de hielo en la herida quirúrgica, eliminando el hielo cuando se enfríe demasiado porque "una bolsa de hielo es segura y de bajo coste, le da al paciente un sentido de poder, ya que se autocuida, y no requiere de dispositivos de alta tecnología"

LIDOCAÍNA POR NANOPARTÍCULAS, EFICAZ EN ANIMALES

El tratamiento del dolor utilizado en el segundo estudio fue un dispositivo de alta tecnología, nanopartículas, que crean un sistema de suministro de liberación controlada para el medicamento anestésico lidocaína no opioide.

A pesar de que los efectos de las inyecciones de lidocaína por lo general son de corta duración, la nanotecnología permitió a los expertos del Instituto de Investigación Metodista de Houston, en Estados Unidos, extender el tiempo de entrega de la droga para que el alivio del dolor durara los siete días del estudio.

Dirigido por Jeffrey L. Van Eps, investigador asociado en el Instituto y residente de Cirugía en el Hospital Metodista de Houston, el equipo de científicos desarrolló un hidrogel inyectable que contiene lidocaína.

El gel también se compone de esferas microscópicas de un polímero biodegradable llamado ácido poliláctico co-glicólico (PLGA), que la agencia norteamericana del medicamento ha aprobado para la administración de fármacos. Este polímero actúa como un "sobre" de nanopartículas de estructuras de sílice de tamaño molecular, cuyos agujeros de esponja contienen el gel de lidocaína, explicó el doctor Van Eps.

"La nanotecnología con PLGA es un sistema ideal de administración de fármacos, ya que podemos adaptar las nanopartículas para permitir una liberación prolongada", resaltó Van Eps, asegurando que este método reduce o evita los efectos secundarios.

Después de probar su sistema de suministro de lidocaína primero en el laboratorio, el equipo obtuvo resultados en un modelo animal con dolor postoperatorio. En los grupos de ratas en diferentes condiciones experimentales, los investigadores clasificaron el dolor de los animales mediante la medición de su respuesta de retirada a la fuerza mecánica aplicada alrededor de la herida quirúrgica.

Las ratas que recibieron el gel de lidocaína a través del nuevo sistema de administración necesitaron dos veces la cantidad de fuerza para provocar una respuesta de dolor en comparación con las de control que no recibieron medicamentos para el dolor después de la incisión, informaron los investigadores.

Con esta misma técnica de medición de la respuesta al dolor, los autores informaron de que el gel de lidocaína también fue superior al tratamiento diario con fármacos antiinflamatorios no esteroideos (AINE) por sí solos.

Los mejores resultados de los estudios se observaron en la terapia diaria de combinación del gel de lidocaína y AINES, que mostró un efecto equivalente al tratamiento narcótico opioide diario. Este hallazgo es importante porque demuestra que el sistema experimental de suministro de fármaco no es inferior al tratamiento con opioides a nivel de dolor, según Van Eps.

Tras señalar que se realizarán estudios en animales más grandes antes de probar esta terapia en pacientes, el director de la investigación calificó la nueva tecnología de "emocionante posible tratamiento del dolor postquirúrgico, la mayor barrera para la atención postoperatoria exitosa".