Publicado 06/12/2015 16:53

EEUU revisará las políticas de admisión universitaria que favorecen a negros e hispanos

People walk past Princeton University's Woodrow Wilson School of Public and Inte
DOMINICK REUTER / REUTERS

   WASHINGTON, 6 Dic. (Reuters/Notimérica) -

   La Corte Suprema de Estados Unidos volverá a abordar este miércoles la polémica cuestión de la raza en las admisiones a las universidades públicas, después de que una mujer blanca se quejara de que la Universidad de Texas la había rechazado a ella frente a "negros e hispanos menos cualificados".

   Tres años después de que un estudiante acudiera a los tribunales por considerar injusto que se tuviera en cuenta la raza en la admisión a las universidades públicas, las batallas legales por esta cuestión se han intensificado.

   Sin embargo, las quejas no han salpicado solo a los centros públicos, también a los privados. Grupos conservadores en contra de las políticas de admisión de las universidades han preparado también una demanda contra el centro más prestigioso del país, Harvard.

   Las políticas adoptadas por este tipo de universidades han sido definidas como de 'acción positiva' y pretenden incrementar las posibilidades laborales y de inclusión de todo tipo de minorías, con especial hincapié en las consideradas como minorías históricas.

   En 1978, el caso de la Universidad de California contra Bakke, determinó la prohibición de establecer cuotas para las minorías, aunque sí acepto que se tuviera en cuenta este hecho en el momento de la admisión.

PROTECCIÓN IGUAL POR LA LEY

   La sentencia del Caso Bukke ha sido muy criticada, ya que para sus detractores utilizar la raza en el proceso de admisión viola el artículo de la Constitución de Estados Unidos que garantiza una protección igualitaria por la ley.

   Durante los últimos 25 años, el conservador y activista legal Edward Blum ha lanzado más de una docena de demandas contra las políticas basadas en la raza.

   La Universidad de Texas, sin embargo, ha destacado que "la raza es algo importante", sobre todo después de incidentes como el que se produjo en junio en una iglesia de Charleston (Carolina del Sur), donde un joven, declarado como supremacista blanco, acabó con la vida de nueve personas negras.

   La Corte Suprema, con mayoría conservadora, ha señalado por su parte que los "remedios raciales" pueden incrementar el conflicto. Durante los últimos años, la Corte ha reducido las políticas destinadas a proteger a los negros o a los hispanos en planes de integración escolar o empleo municipal.