CIUDAD DE MÉXICO, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las fuerzas de seguridad mexicanas han encontrado seis cadáveres enterrados en dos fosas clandestinas situadas en un paraje de la localidad de Nueva Odisea, en el estado de Baja California, en el norte de México, según ha informado el diario 'La Jornada'.
Uno de los cuerpos tiene tres orificios por impacto de bala y otros tres están desmembrados, según la información preliminar del peritaje realizado en un cerro del rancho San Marcos.
El rotativo mexicano ha explicado que un primer indicio llevó a policías ministeriales y a militares hasta un pozo artesanal de agua en el que fueron encontrados cuatro cadáveres. La alerta llegó por una denuncia anónima realizada al teléfono de emergencias 911 el pasado viernes.
Tras el rescate de los cuatro cuerpos en el pozo usado como fosa clandestina, en el marco de una operación que se prolongó durante unas cinco horas con la participación de los bomberos de Ensenada, los investigadores ampliaron su área de inspección hasta encontrar un campamento abandonado.
Allí los investigadores hallaron los cadáveres de otros dos hombres, uno de ellos calcinado, debajo de un área cubierta con pedazos de malla sombra y junto a dos vehículos con placas de matrícula de California (Estados Unidos).
El lugar de las dos fosas se encuentra situado en el municipio de San Quintín, en un camino localizado a diez kilómetros al este de la carretera Transpeninsular.