Actualizado 18/04/2006 20:16

España/Colombia.- La embajadora de Colombia en Madrid visita a los 48 presos de su país internos en la cárcel de Palma

La mayoría de los reclusos colombianos son víctimas de engaños para introducir drogas en su cuerpo


PALMA DE MALLORCA, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -

La embajadora de Colombia en España, Noemí Sanin, realizó una visita al centro penitenciario de Palma para conocer de primera mano la realidad que están viviendo sus 48 compatriotas que están cumpliendo penas en esta prisión por diferentes delitos, la mayoría relacionados con el tráfico de drogas.

En declaraciones a Europa Press, la embajadora colombiana explicó que los reclusos colombianos, cuarenta hombres y ocho mujeres, "están satisfechos con el trato recibido y no han mostrado quejas sobre su estancia en la cárcel palmesana" y añadió que la mayoría de ellos, "han expresado una clara voluntad de reinserción".

Sin embargo, algunos presos colombianos le han trasladado su deseo de tener más oportunidades de trabajo en España, una petición que la embajadora aseguró que trasladará a los empresarios colombianos que tienen negocios en nuestro país.

Noemí Sanin, que se reunió con sus compatriotas en el aula socio-cultural de la cárcel el pasado domingo, estuvo acompañada por la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, y el director de la cárcel de Palma

Según explicó Sanin, durante la conversación que mantuvo con los reclusos pudo conocer los motivos que les han llevado a su encarcelamiento, así como analizar el tema de sus derechos y las posibilidades que existen para una posible reinserción.

En la actualidad, la población reclusa de colombianos condenados en España ronda los 2.500, mientras que en el caso concreto de Palma, de los 48 colombianos presos, 40 ya cumplen condenas.

TRAFICAN DROGA EN SU CUERPO

Por otra parte, la embajadora añadió que la mayoría de estos presos son "mulas", es decir, víctimas de un engaño mediante el cual aceptan traer a España drogas escondidas en su cuerpo y son detenidos por las fuerzas de seguridad del Estado.

Otros casos tienen que ver, según dijo, con traficantes de pequeñas cantidades de estupefacientes, generalmente cocaína, para pagarse de esta forma deudas y obligaciones contraídas por estas personas en nuestro país.

Sanin quiso aprovechar la oportunidad para agradecer a las autoridades judiciales españolas la decisión adoptada la semana pasada de aplicar penas alternativas a los presos inmigrantes en condenas de menos de 6 años, evitando de esta forma la expulsión a sus países de origen.