Publicado 24/02/2023 17:10

Familias ucranianas que viven en España: "Soy muy feliz a pesar de todo. La vida ha cambiado, pero tengo mucha suerte"

Fundación madrina ayuda a refugiados ucranianos
Fundación madrina ayuda a refugiados ucranianos - EUROPA PRESS

   MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

   Coincidiendo con el primer año de la guerra en Ucrania, Fundación Madrina ha reunido este viernes 24 de febrero en Madrid a familias ucranianas a las que ha hecho entrega de productos básicos como alimentos, ropa térmica y zapatos nuevos. En declaraciones a Europa Press, los asistentes han coincidido en destacar que son "felices a pesar de todo" porque han tenido "mucha suerte" de venir a España, donde afirman que los españoles les ayudan y son "muy amables".

   "Me encanta este país, creo que he encontrado mi cultura, me encanta como pensáis y como vivís. Me siento muy feliz a pesar de todo; tengo mucha suerte y no creo que sea una mujer fuerte, creo la vida ha cambiado, he perdido muchas cosas, pero España es un gran país para vivir, soy muy afortunada", ha señalado a Europa Press Valentyna Zalievska, madre de una hija.

   Según Fundación Madrina, en el comienzo de la guerra, cerca de 1.800 familias españolas de acogida y pueblos de la España vaciada acogieron a madres con sus niños procedentes de Ucrania. Este es el caso de Yevheniia Zvireieva, una mujer ucraniana con tres hijos que fue acogida los cuatro primeros meses por una familia española, hasta que vino su marido y su hermano un tiempo después.

   "Estuvimos viviendo con una familia española y después encontramos un pequeño apartamento. No tuvimos tantos problemas, vinimos con dos maletas, no teníamos nada solo un poco de ropa, pero la familia española nos ayudó con todo, con ropa y con alimentos, se hizo más fácil. Ahora vivimos todos juntos", ha declarado Zvireieva.

   Además, ha añadido que le gustaría quedarse en España "para siempre" a pesar de tener una hija mayor en Ucrania que no pude venir ya que su pareja pertenece al Ejército y "no quiere dejarle solo". "Aquí es muy tranquilo, allí está destrozado el 80%. Es muy complicado volver allí, me gustaría encontrar un trabajo y quedarme aquí", ha precisado.

   La situación de Zhanna Huliaka, madre de un hijo de un año, está siendo diferente, ya que la mujer huyó con su hijo y con sus padres jubilados del país pues vivían en una ciudad militar. "Había mucha gente del Ejército y había muchos misiles el primer día, teníamos que huir", ha afirmado.

   A pesar de que compraron varias veces los billetes, los perdieron en varias ocasiones hasta que pudieron llegar a España. "Cuando por fin pudimos venir, descubrimos que tenía un cáncer: estoy con quimioterapia aquí en España, es muy difícil, queremos paz y volver a Ucrania, mi marido está allí", ha indicado entre lágrimas.

   Durante 2022, Fundación Madrina mandó material humanitario a Ucrania, especialmente material sanitario, ropa térmica, medicinas, alimentación e higiene infantil, y cinco generadores para grandes hospitales. Actualmente se está preparando un envío de ambulancias, coches de bomberos y grandes generadores, demandado por hospitales devastados por la guerra.

   Sobre el apoyo prestado en España, detallan que más de 200 niños y sus familias se benefician de la alimentación del 'Banco del Bebe'; además, se ofrece ayuda a los adultos en el proceso de desarrollo de curriculum y empleo, alojamiento, regularización legal, sanitaria y educativa. Mientras, el servicio de atención socio-sanitario 'SOSUkraine 24h' ha recibido más de 4.000 llamadas de refugiados y personas en zonas de conflicto como sótanos y túneles con la finalidad de ser rescatadas.

   "El problema es encontrar alojamiento, tenemos pero solo hasta mayo, tenemos que en contra otro sitio. Es difícil por el idioma, es difícil aprenderlo, pero los españoles son muy amables y nos ayudan con todo. Hay esperanza", ha afirmado Zhanna Huliaka.

MEDIDAS "MÁS RÁPIDAS Y EFICACES"

   Sin embargo, Fundación Madrina ha advertido de que la crisis que están viviendo las familias ucranianas en España las sitúan al borde de la vulnerabilidad y situación de calle. Según la organizacion, se han comenzado a detectar a las primeras familias ucranianas en las "colas del hambre" y muchas familias acogedoras comienzan a echar a la calle a sus familias acogidas porque ya nos las pueden mantener por el aumento del precio de los alimentos, el transporte y la energía.

   Por ello, demanda a la administración medidas de apoyo al refugiado, "más rápidas, permanentes y eficaces" como homologación "exprés" de títulos universitarios sanitarios y de ingenierías, para facilitar el acceso al trabajo y apoyo con avales administrativos para acceder a alquileres sociales.

   En este sentido, alerta de que, al no poder homologar rápidamente sus títulos, estas personas tienen que infraemplearse y afirma que, con solo el 13% de empleabilidad, los refugiados ucranianos entran en vulnerabilidad en España.

   También ha denunciado que, en varias comunidades, ha aumentado "alarmantemente" el número de niños tutelados por los servicios sociales, como consecuencia de situaciones de vulnerabilidad, de calle, o bien por denuncias anónimas.

   Para el éxito de la acogida de los niños y familias ucranianas, la Fundación Madrina se ha coordinado con el Ministerio de Inclusión, Ministerio de Defensa, Gobierno de Polonia, la embajada de Ucrania en España, la Comunidad de Madrid, Cruz Roja, ACCEM, el hospital Zendal, SEPLA, la Junta de Castilla y León, La Junta de Castilla La Mancha, DB Schenker, Novotel, Word Central Kitchen, Northgate, entre otras decenas de entidades y empresas.