Actualizado 25/03/2019 14:36

La historia de cómo se movilizaron hospitales, seguros de viaje y compañías aéreas para operar a Ewdys

Operación hospital
NPH

   MADRID, 20 Dic. (Notimérica)

   Recuerda su madre Yris que una tarde de marzo del año pasado la nariz del joven Ewdys comenzó a sangrar y no le dieron importancia. Al día siguiente el sangrado fue a más y cuando acudió al hospital de San Francisco de Macorís, la localidad dominicana donde vivían, le diagnosticaron una alergia. Pasaban los días y el sangrado no paraba, por lo que comenzaron a hacerle pruebas más específicas hasta dar con el diagnóstico definitivo, que estaba a años luz del inicial. A Ewdys, de 14 años, le descubrieron un nasioangiofibroma juvenil.

   Recuerda Yris también cómo en aquel momento no comprendió nada de lo que el médico le estaba explicando. Esa enfermedad de nombre tan largo es un tumor benigno que con el paso de los meses puede tornarse malo. El médico del hospital de San Francisco fue claro: "Aquí no hay equipos ni especialistas para llevar este caso". Trasladaron a Ewdys a Santo Domingo, la capital dominicana donde, tras visitar varios hospitales y recibir "larga tras larga" de médicos que no se atrevían a tomar las riendas de la operación, encontraron a quien se atrevió a hacerlo.

   "Una mañana me enviaron a un médico que decidió hacerse cargo del caso, empezaron a hacerle pruebas específicas y le operaron por primera vez abriendo por el maxilar para ver si por ahí podían sacar el tumor", recuerda a Notimérica ahora Yris vía videoconferencia desde su casa, donde su hijo se recupera tras un viaje a España para ser operado con éxito en el que intervinieron decenas de personas y se movilizaron innumerables recursos.

   Tras esa primera intervención en Santo Domingo el tumor volvió a aparecer y seguía creciendo, así que fue en ese momento, en septiembre de este año, cuando Yris, "desesperada", contactó con Nuestros Pequeños Hermanos (NPH), una organización sin ánimo de lucro con cerca de setenta años de historia que trabaja por la defensa de la infancia tanto en temas de educación como de salud en nueve países de Iberoamérica. En concreto, Yris llegó hasta Marta Gárate, una enfermera madrileña voluntaria de NPH y del proyecto Yudelkis, que consiste en identificar casos de niños y adolescentes de Latinoamérica que por la circunstancia que sea no pueden ser operados con sus propios recursos o en sus países de origen y en montar toda la logística necesaria para que alguien se haga cargo de sus casos, fundamentalmente en España.

MOVILIZACIÓN

   Cuando el caso de Ewdys llegó a Marta supo que había que actuar rápido. "El tumor seguía creciendo y en pocos meses podía convertirse en maligno, así que comenzamos a movilizar todos los contactos y recursos que teníamos", relata la enfermera a Notimérica desde el hospital de Torrejón de Ardoz, donde trabaja desde hace más de siete años. En ese hospital, público pero de gestión privada, Marta habló con la dirección médica para ver si se podría trasladar allí a Ewdys y si el centro podía hacerse cargo de los gastos médicos. La respuesta fue un rotundo 'sí'.

   Conseguido el centro hospitalario, había que encontrar doctor para la operación. Fue la jefa de servicio de Otorrinolaringología del hospital de Torrejón, Nieves Mata, quien asumió las riendas de la operación junto a su homólogo del 12 de Octubre, el doctor Alfredo García Fernández. Ambos acompañados por los anestesistas Patricia Cid y Sergio Lorrio. Ya estaba listo, por tanto, el hospital y el equipo médico. Ahora había que hacerse cargo de todos los gastos propios de la logística del viaje.

   Es ahí donde entra en acción NPH, cuyo papel es fundamental para el engranaje de todo el proceso. Fueron ellos quienes se encargaron de buscar a quien se hiciera cargo de los billetes de avión y del seguro tanto de viaje como médico para Ewdys e Yris. En pocos días, tal como recuerda Javier Adsara, director de la organización en España, la aseguradora DKV se había ofrecido a hacer frente al seguro médico para el joven y la compañía Evelop había puesto a disposición dos billetes de avión desde Santo Domingo con destino Madrid. El resto de gastos, los propios del alojamiento y la manutención para ambos durante los días que estuvieron alojados en Madrid previos y post al hospital, así como los gastos surgidos por cuestiones administrativas, los cubrió directamente NPH gracias a las donaciones privadas que reciben regularmente para llevar a cabo estas operaciones.

   Todo estaba finalmente dispuesto, así que el 18 de noviembre Ewdys viajó junto a su madre a Madrid. El día 19 ya se le hizo el preoperatorio y el 23 fue operado. Tras más de diez horas de cirugía, dos días en la Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI) y otros dos en planta, salió del hospital de Torrejón y el día 2 de diciembre volaron de vuelta hacia República Dominicana.

   Hoy Ewdys descansa y se recupera en su casa de San Francisco de Macorís mientras su madre sigue agradeciendo sin cesar el esfuerzo de cada una de las personas que intervino en la operación de su hijo. "Se encuentra muy bien, tiene dolores pero sabemos que pronto va a poder hacer vida normal", asegura. Ewdys, quien desde niño había jugado al béisbol, hoy lo tiene prohibido. Antes de la operación porque se lo prohibieron por si algún golpe en la cabeza agravaba la situación y después de ella porque también se lo han recomendado los médicos. "No pasa nada, podré hacer otros deportes", asegura el joven, que interviene momentáneamente en la conversación de su madre con Notimérica.

   Es solo un caso más de éxito de los cientos que durante todos estos años han llevado a cabo tanto NPH como Yudelkis. Un caso más que ha sido posible gracias a la movilización de decenas de personas, de sustanciales costes económicos y fundamentalmente de buena voluntad. Porque tras haber concluido con éxito la operación de Ewdys, Marta viajará a Honduras para seguir detectando necesidades y lo hará gracias a que la dirección de su hospital le permite compaginar ambos trabajos. Y mientras Ewdys se recupera de la operación --y su madre Yris del susto--, Javier seguirá dedicando su día a día a conseguir fondos que permitan hacer frente al siguiente caso que les toque asumir.