Actualizado 28/06/2010 21:09

Honduras.- RSF denuncia la violencia ejercida contra los medios de comunicación en Honduras desde el golpe de Estado

Reuters


TEGUCIGALPA, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -

Reporteros Sin Fronteras (RSF), la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC) y el Comité por la Libre Expresión (C-Libre) expresaron este lunes su malestar por la violencia que se ha ejercido contra los medios de comunicación y sus profesionales en Honduras desde que se perpetrara el golpe de Estado del 28 de junio de 2009 y que continúa en el mandato del presidente Porfirio Lobo.

El comunicado emitido de forma conjunta por estas organizaciones distingue dos periodos. El primero, que abarca la etapa del régimen interino liderado por Roberto Micheletti, estaría caracterizado por "actos de censura, sabotajes, brutalidades y militarizaciones de medios de comunicación conocidos por su línea de oposición al golpe" que también afectaron a la prensa internacional cuyos periodistas fueron, en muchos casos, expulsados del país.

El segundo periodo, que comprende el mandato de Lobo, ha estado marcado por el asesinato de ocho periodistas y de numerosos defensores de los Derechos Humanos que, según denuncia este escrito, no han sido investigados con la suficiente diligencia debido a la indiferencia del Gobierno hondureño ante estos crímenes.

"Es posible que todos estos asesinatos no estén relacionados con la violencia política que afecta al país desde hace un año. Pero no justifica en ningún caso la actitud de las autoridades que consiste en excluir sistemáticamente, y a priori, cualquier relación entre estos dramas y dicha violencia", recoge el documento.

En este contexto, las organizaciones firmantes solicitan la instalación de una Comisión Interamericana de Derechos Humanos permanente en el país centroamericano, así como la apertura de una investigación civil respaldada por la Organización de Estados Americanos (OEA) con el fin de garantizar su independencia.

En lo que se refiere al ámbito de protección de los medios de comunicación, exigen que se restituyan los equipos sustraídos de las empresas informativas en los saqueos perpetrados por el Ejército y que se respete la "pluralidad y la diversidad informativa para los sectores comercial, público y comunitario".