Actualizado 10/01/2012 23:18

Indígenas mapuches niegan que hayan sido los causantes del incendio en el que murieron siete brigadistas


SANTIAGO, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Coordinadora Mapuche Arauco Malleco (CAM) ha negado su responsabilidad en los incendios que han arrasado miles de hectáreas en el sur de Chile y que la semana pasada provocaron la muerte de siete brigadistas que intentaban sofocar las llamas.

Funcionarios del Gobierno de Sebastián Piñera habían acusado al pueblo mapuche --que equivale a alrededor del cuatro por ciento de la población-- como autor del ataque a propiedades de empresas madereras debido a las disputas de unas tierras y también han dejado entrever su responsabilidad en los últimos incendios en el sur del país.

A pesar de que poco después el Ejecutivo se vio obligado a rectificar, la CAM ha decidido dar a conocer un pronunciamiento oficial de la comunidad mapuche para aclarar que esa comunidad indígena "no tiene relación alguna con los hechos ocurridos" en un fundo de Forestal Mininco, situado en la comuna de Carahue, en la región de La Araucanía, a unos 700 kilómetros al sur de Santiago.

"Reivindicamos dicho predio como territorio ancestral mapuche usurpado por el empresariado forestal, razón por la cual responsabilizamos a estos como los únicos causantes de esta tragedia", señala el comunicado divulgado por los medios locales.

La empresa había asegurado que el incendio fue intencionado, mientras que el Gobierno apoyó esta teoría responsabilizando a los indígenas. Según la CAM, estas versiones responden a un "montaje mediático" que obedece a "una estrategia política que busca justificar ante la opinión publica la aplicación de la Ley Antiterrorista a las comunidades mapuche en conflicto".

Los mapuches también lamentaron "profundamente la muerte de gente pobre, de jóvenes trabajadores, víctimas también, del sistema económico", y denunciaron que los brigadistas fallecidos trabajaban "en condiciones deplorables, con salarios miserables, sin las más mínimas medidas de seguridad, que fueron enviados al choque para defender los intereses económicos de una de las familias más ricas de Chile".