CIUDAD DE MÉXICO, 21 Dic. (Notimérica) -
La actriz mexicana Kate del Castillo ha regresado a su país natal después de casi tres años en Estados Unidos, donde ha residido de manera permanente desde que llevara a cabo un encuentro con Joaquín 'El Chapo' Guzmán, lo cual supuso para la intérprete lo que ella ha descrito como "una persecución política" del Gobierno de Enrique Peña Nieto que provocó "provocaron un juicio mediático que afectó mis derechos al presentarme ante la sociedad como delincuente, violando mi presunción de inocencia".
Coincidiendo con la llegada a la Presidencia de México de Andrés Manuel López Obrador, la actriz ha decidido volver al país azteca y ha dado una conferencia de prensa frente a cientos de periodistas en la que ha dejado claro que no quiere saber nada de 'El Chapo' Guzmán, cuyo juicio se está desarrollando en los últimos días en Nueva York acaparando toda la atención mediática.
"Estoy un poquito hasta acá... de esto. La verdad es que no quiero hacer nada más sobre él", indicaba la actriz. Del mismo modo, ha asegurado "no he sido llamada a testificar en el juicio de El Chapo", por lo que no está previsto que forme parte de dicho juicio. Sin embargo, sus abogados sí han reconocido que la intérprete ha sido interrogada durante estos años en varias ocasiones por agentes federales de Estados Unidos. "No aporto nada porque no sé nada. Ni siquiera estábamos en su casa, era un lugar que escogió en la sierra. Y solo pasé unas cuantas horas con él", ha dicho Kate, según 'El País'.
Kate del Castillo se reunió con el capo de la droga en enero 2016 cuando el narcotraficante se encontraba huido después de haberse escapado de la cárcel de máxima seguridad en la que permanecía retenido desde su captura. La noticia de que la conocida intérprete, acompañada del actor estadounidense Sean Penn y de dos productores de Hollywood, se había reunido en territorio mexicano --en las montañas de Durango-- con 'El Chapo', supuso un duro golpe para el Gobierno de Peña Nieto.
La fiscalía mexicana inició una investigación contra la actriz por supuestos vínculos con el crimen organizado, así como cuestionó un posible caso de lavado de dinero a través de su marca de tequila. En 2017, los tribunales le dieron la razón, y Kate del Castillo decidió interponer una demanda contra el Gobierno --aun en vigor-- al que acusa de filtrar una serie de conversaciones privadas con el narco.
Asimismo, Kate del Castillo asegura que se ha sentido "estigmatizada" por aquel encuentro con el capo de la droga, en especial por su condición de mujer: "Ninguno de los dos productores que la acompañaron aquella noche con El Chapo ni Sean Penn han sido investigados. Solo yo, por mi condición de mujer y quizá por ser crítica con el Gobierno", ha dicho en la conferencia de prensa dada tras su regreso. La indemnización solicitada por tales hechos asciende a los 60 millones de dólares.