Actualizado 17/07/2018 11:06

La malaria afecta a más de 200 millones de personas y provoca más de 600.000 muertes al año

Malaria
COMMONS.WIKIMEDIA - Archivo

   SANTA CRUZ DE TENERIFE, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -

   "La malaria actualmente afecta a más de 200 millones de personas, provocando hasta 600 mil muertes al año", afirmó el Dr. Patarroyo. El Plasmodium Vivax es una de las variantes más importantes, causa hasta el 75 por ciento de las infecciones de esta patología en países latinoamericanos, frente a Plasmodium falciparum, que predomina principalmente en África y que puede ser causante de hasta el 80 por ciento de los casos.

   Así lo manifestó ayer lunes en el marco del ciclo de conferencias establecido dentro del programa de CampusÁFRICA 2018: 'Las sociedades africanas frente a los retos de la globalización', que se inició con la exposición de las últimas investigaciones sobre el desarrollo de nuevas vacunas.

   El acto, que se desarrolló en la Facultad de Farmacia de la Universidad de La Laguna, contó con el Dr. Manuel Alfonso Patarroyo, del Instituto de Inmunología de Colombia; el Dr. Vicente Larraga Rodríguez de Vera, del Centro de Investigaciones Biológicas CSIC-Madrid, y el Dr. Antonio Muro Álvarez, Universidad de Salamanca.

   El Dr. Manuel Alfonso Patarroyo inició el ciclo de conferencias con su ponencia: Malaria, desarrollo de una vacuna contra el Plasmodium Vivax. Según el Dr. Patarroyo, el problema principal de la malaria radica básicamente en la capacidad de mutación que puede tener este patógeno. A lo que añadió que esto provoca que personas que ya han sufrido un episodio de malaria, puedan volver a repetirlo pero con una nueva variante.

   Actualmente, el Instituto de Inmunología de Colombia se encuentra inmerso en el desarrollo de una vacuna aplicable al Plasmodium Vivax, nombre científico de esta variante de la malaria. "La gran dificultad de este tipo es que el parásito permanece oculto bien en una célula hepática o en un glóbulo rojo y además es capaz de invadir la célula en tan solo un minuto", destacó el investigador. A lo cual añadió que otra de las grandes dificultades es la capacidad que tiene para "entrar en el organismo con una fuerte carga inmume" que complica la capacidad de respuesta del sujeto que padece esta enfermedad.

   El Plasmodium Vivax se caracteriza además por su capacidad de mutación. "Esta característica hace que las investigaciones clásicas no sean efectivas ya que no se puede actuar ante las diferentes cepas que van surgiendo", puntualizó. En esta línea, el Dr. Patarroyo apuntó a la necesidad de hacer incidencia en los mecanismos que utiliza el patógeno para adherirse a las células. "Desde nuestro instituto nos interesa más saber que le resulta mejor al parásito para infectar, en qué forma invade la célula hepática, o un glóbulo rojo.

   Hoy, las investigaciones, que se encuentran en fase de prueba en animales, son positivas en un 80%. "En este caso no podemos hacer pruebas en humanos, a pesar de que estamos avanzando en las investigaciones, sí que es cierto que todavía no estamos al mismo nivel en el que están los resultados obtenidos para tratar la variante de Plasmodium Falciparum", puntualizó.

   Una dificultad que radica principalmente en que el número de parásitos cultivados es menor para esta variante de la malaria. Una circunstancia que desde el Instituto de Inmunología de Colombia han salvado mediante la adaptación de perfiles que permitan continuar las investigaciones. "Este es uno de los principales problemas, tenemos que crear el huésped adecuado para poder seguir investigando y esto genera cierto retraso", explicó el experto.

LEISHMANIA Y TREMATODOS.

   Por su parte, el Dr. Vicente Larraga Rodríguez de Vera, del Centro de Investigaciones Biológicas (CSIC-Madrid), abordó el desarrollo de la Leishmania y su incidencia mundial. Esta patología es causada por protozoos y afecta tanto a animales como a humanos, llegando a provocar úlceras, y en su estadío más grave, puede generar la inflamación del hígado o el bazo.

   Una patología que va en aumento en los últimos años debido, principalmente, al aumento de la temperatura en el mundo. "El cambio climático está siendo uno de los factores claves para su desarrollo. De hecho, zonas en las que antes no existía por el frío y sin embargo, ahora al bajar las temperaturas están apareciendo casos", puntualizó.

   Hoy no existen vacunas para tratar esta patología en humanos, tan solo hay tres comercializadas a nivel mundial y son exclusivamente de aplicación en animales.

   El Dr. Larraga destacó durante su exposición el valor de las investigaciones y las pruebas que se realizan con animales. "Existe un control muy estricto sobre los perros. Cuentan con un espacio adecuado para vivir; nada que ver con jaulones y además cuentan con un equipo de veterinarios que les hace un seguimiento", explicó el experto.

   En representación de la Universidad de Salamanca, el Dr. Antonio Muro Álvarez, expuso su ponencia: Vacunas contra trematodos: ¿Dónde estamos? Una ponencia que el investigador comenzó con un análisis de la situación actual de las investigaciones. "Soy pesimista en estos momentos, la investigación va un por un lado y la financiación por otra. Esto me lleva a preguntarme si en un plazo corto tendremos una vacuna para tratar enfermedades como la malaria cuya fase de investigación está avanzada", puntualizó.

   Pero este no es el único problema al que se enfrentan los investigadores. El Dr. Muro apuntó a "las dificultades burocráticas" que afrontan los investigadores a la hora de realizar pruebas en animales. "Sería ideal contar con un ratón biónico que nos permitiera hacer prácticas, pero no es el caso y los ensayos clínicos son necesarios".

   Como muestra de la importancia de estas investigaciones y ensayos, el Dr. Antonio Muro destacó las prácticas realizadas para el desarrollo de la vacunas para el tratamiento de trematodos, un parásito que afecta a los vertebrados, y que aparece en el tubo digestivo, glándulas anejas y que también puede afectar al sistema respiratorio. "Actualmente, en nuestras investigaciones hemos llegado a utilizar hasta 168 ratones", detalló.

   La nueva era de vacunas, según expuso el investigador de la Universidad de Salamanca, deben dar un paso más y contar con unos "conectores" que las hagan más eficaces. "No se trata de tener la vacuna, se trata de que sea efectiva y para ello tiene que ser aceptada por el sujeto que la recibe, si la rechaza, no sirve de nada lo investigado", sentenció.