Actualizado 01/03/2016 17:04

Más de 96 millones de turistas internacionales visitaron América Latina en 2015

El Estado mexicano de Chihuahua presente en FITUR
PIXABAY

   MADRID, 1 Mar. (Notimérica) -

   El turismo internacional en América Latina bate nuevos records. Según la Organización Mundial del Turismo (OMT), el número de viajeros extranjeros registrados en la región superó los 96,6 millones, la mayor cifra alcanzada durante la última década.

   Este aumento de turistas coincide con lo registrado en el resto del mundo, ya que las llegadas de visitantes internacionales aumentaron un 4,4 por ciento en 2015, hasta alcanzar un total de 1.184 millones. En comparación con 2014, el pasado año hubo alrededor de 50 millones más de turistas internacionales.

"El turismo internacional alcanzó buenas cuotas en 2015. El buen comportamiento del sector está contribuyendo al crecimiento económico y a la creación de empleo en muchos lugares del mundo, por lo que resulta esencial que los países promuevan políticas para fomentar el continuo crecimiento del turismo, como son las políticas de facilitación de los viajes, de desarrollo de los recursos humanos y de sostenibilidad", manifestó al respecto el secretario general de la OMT, Taleb Rifai.

   Este es el sexto año consecutivo de crecimiento superior a la media, lo que supone un aumento anual de las llegadas internacionales del cuatro por ciento o más desde el 2010, después de la crisis.

En el caso de Latinoamérica, los analistas indican que este repunte se ha debido en gran medida a una mayor afluencia de estadounidenses, así como a una creciente demanda de viajes por parte de la clase media latinoamericana, ya que siete de cada diez llegadas tienen su origen dentro de la región.

   De hecho, en México, la llegada de viajeros procedentes de Colombia creció un 24,1 por ciento, hasta llegar a los 407.395 turistas. Así, el país sudamericano ha logrado posicionarse como el cuarto principal mercado emisor para México, después de Estados Unidos, Canadá y el Reino Unido. Argentina, por su parte, ocupa una quinta posición, con un repunte mayor, de casi el 38,4 por ciento en 2015. Brasil por el contrario, registró una bajada del 1,8 por ciento, situándose en el séptimo peldaño.

   "El turismo se ha convertido en una fuente clave de divisas y de empleo en la región", indicó la especialista del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Mercedes Velasco, en declaraciones recogidas por 'Caribbean News'.

   El sector genera más del 8 por ciento de los trabajos en América Latina y casi el 13 por ciento en el Caribe. Los ingresos obtenidos por esta actividad, explica Velasco, superan los 79.000 millones de dólares. Además, la zona ha sido la segunda región del mundo, después de Asia-Pacífico, que ha logrado el mayor repunte de viajeros foráneos en la última década.

   Asimismo, en todo el continente, las llegadas de turistas internacionales en América crecieron 9 millones, hasta alcanzar los 191 millones, consolidándose así los excelentes resultados de 2014.

   La apreciación del dólar estimuló el turismo emisor de los Estados Unidos, lo cual benefició sobre todo al Caribe y a América Central, que registraron ambas un crecimiento del 7 por ciento. Los resultados en América del Sur y América del Norte (ambos cuatro por ciento) fueron cercanos a la media.

PERSPECTIVAS

   En cuanto a las perspectivas para el 2016, los resultados del Índice de Confianza de la OMT siguen siendo muy positivos para el 2016, aunque a un nivel ligeramente inferior en comparación a los dos años anteriores, esperando un crecimiento del cuatro por ciento el próximo año.

   Por regiones, se espera que el crecimiento más significativo se produzca en América (entre un cuatro y un cinco por ciento), así como en Asia y el Pacífico (mismas previsiones). Entretanto, Europa registraría un aumento entre el 3,5 por ciento y el 4,5 por ciento, mientras que las proyecciones para África (entre un dos y cinco por ciento) y para Oriente Medio (dos y cinco por ciento) son positivas, aunque con un mayor grado de incertidumbre y volatilidad.