MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
Al menos 14 agentes de la Guardia Nacional de México han resultado heridos tras el lanzamiento de piedras, petardos y hasta un tráiler de carga sin conductor por parte de un grupo de estudiantes que han intentando bloquear la autopista que va desde Acapulco de Juárez hasta Ciudad de México.
Más de 250 efectivos de la Policía se han enfrentado a casi medio millar de jóvenes, según recoge el diario 'El Universal', a la altura del municipio de Chilpancingo, capital del estado mexicano de Guerrero, un grupo que pretendía cortar la autopista en protesta por la desaparición de los 43 estudiantes 'normalistas' de Ayotzinapa.
El grupo de manifestantes llegó alrededor de las 12.00 horas (hora local) a bordo de autobuses procedentes de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotnizapa, según recoge Milenio Televisión. Los efectivos de la Guardia Nacional habrían intentado dialogar con los manifestantes pero, ante su negativa y después de un lanzamiento de piedras y petardos, se replegaron.
"Esta acción permitió liberar la caseta de peaje y los 'inconformes' se alejaron del punto, momento en el que emplearon un tráiler sin conductor y lo lanzaron contra la línea de efectivos de la Guardia Nacional, quienes esquivaron la unidad de carga que impactó contra una instalación, metros adelante, de la caseta de cobro", ha explicado la Guardia Nacional en un comunicado.
Esta caseta de control de pagos de derechos de tránsito se encuentra sobre la autopista que conecta a la capital del país con el puerto turístico de Acapulco, en costas del Pacífico, lo que ha provocado el desviamiento del tráfico en la zona.
Los agentes heridos han sufrido quemaduras, contusiones y uno de ellos una rotura de tibia, según ha informado el cuerpo policial. La Guardia Nacional ha afirmado que "refrenda su compromiso de respetar los Derechos Humanos, apegado al uso proporcional de la fuerza, por lo que rechaza categóricamente cualquier uso de la violencia como medio para dirimir las demandas sociales".
Los 43 alumnos de la Escuela Normal de Ayotzinapa, en el estado de Guerrero, desaparecieron en la madrugada del 27 de septiembre de 2014 en el vecino municipio de Iguala durante una protesta contra las autoridades locales.
La primera versión oficial fue que fueron sorprendidos por la organización criminal Los Rojos, como parte de un ajuste de cuentas entre grupos rivales, y que los sicarios los mataron e incineraron y se deshicieron de sus restos en el basurero de Cocula, hechos refutados posteriormente por una nueva investigación.
La Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del caso Ayotzinapa reveló en octubre del año pasado que el Ejército mexicano tenía información sobre este caso desde 2014, como denunciaban las familias de las víctimas, y que no fue entregada pese a haber un decreto presidencial de 2018 que obligaba a ello.