CIUDAD DE MÉXICO, 3 May. (Notimérica) -
México registró un total de 20.390 desplazados internos forzados durante el año pasado. La cifra se suma a las 329.917 víctimas de desplazamiento interno forzado en el país entre 2006 y 2017, donde hubo presencia o uso de violencia. Todas estas personas tuvieron que moverse dentro del país para evitar los efectos de un conflicto armado, situaciones de violencia generalizada o violaciones de derechos humanos.
Así lo afirma el Informe 2017 sobre Episodios de Desplazamiento Interno Forzado Masivo, presentado este miércoles por la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH).
El texto sostiene que solo en 2017, se produjeron 25 eventos de desplazamiento interno forzado. Cada uno de ellos se caracterizó por el uso de violencia y alcanzó el mencionado total de 20.390 personas.
La CMDPH divide las causas del desplazamiento interno forzado en México durante el año pasado en tres. Por un lado, los grupos armados organizados; por otro, la violencia política, la conflictividad social y los conflictos territoriales y, por otro, los proyectos de desarrollo.
El estado donde hubo más desplazamientos internos de este tipo durante el año pasado fue Chiapas, con un total de 6.090 personas a lo largo de tres de los mencionados eventos. Le siguen Guerrero, con 5.948 desplazados y siete eventos, y Sinaloa, con 2.967 personas y cinco eventos.
"Los desplazados internos no tienen un marco de protección, están como en una especie de limbo jurídico donde nadie les confiere derechos. La personas desplazadas quedan a merced de la voluntad de los gobiernos locales", señala la coordinadora del Área de Desplazamiento Interno de la CMDPH, Brenda Pérez.