MÉXICO DF, 13 Abr. (EUROPA PRESS) -
Autoridades de Guatemala, Honduras y El Salvador no descartan que entre los 116 cadáveres hallados hasta el momento en las 'narcofosas' ubicadas el estado mexicano de Tamaulipas (noreste) haya ciudadanos de esos países que pudieron haber sido secuestrados por grupos de narcotraficantes.
La semana pasada fueron localizadas fosas comunes con 59 cadáveres en San Fernando, un enclave de Tamaulipas donde los narcotraficantes y las bandas criminales mantienen una intensa actividad. En los días siguientes la Policía localizó otros cementerios clandestinos en zonas cercanas, sumando 116 el número de personas que han muerto en circunstancias desconocidas.
Los hallazgos han sido en el mismo municipio donde el pasado mes de agosto aparecieron los cuerpos de 72 migrantes originarios de países como Honduras, Guatemala, Ecuador y El Salvador, entre otros.
Las autoridades atribuyen todas estas matanzas al cártel de Los Zetas. Unas 17 personas se encuentran detenidas por su presunta relación con los últimos crímenes.
"Lamentablemente creemos que hay más compatriotas nuestros entre las víctimas, no lo podemos descartar", ha dicho al diario local 'El Universal' el cónsul de Guatemala en México, Héctor Sipac Cuin, quien ha exhortado al Gobierno de Felipe Calderón a informar sobre el proceso de identificación de los cadáveres. "Hasta el momento no hemos recibido ninguna notificación oficial para colaborar", ha agregado.
Hasta la fecha han sido identificados apenas tres de los cadáveres encontrados en San Fernando. Entre ellos hay un guatemalteco identificado como Feliciano Tagual Ovalle, de quien no se sabía nada desde el pasado 24 de marzo cuando conversó con su familia y les dijo que iba camino a Estados Unidos junto a otros connacionales.
"Por este testimonio de la familia, pensamos que podría haber más compatriotas asesinados e inhumados en estas fosas clandestinas", ha enfatizado Sipac Cuin.
Por su parte, el embajador de El Salvador en México, Hugo Carrillo Corleto, ha comentado que "hasta ahora ninguna autoridad en México" les ha informado de que "pudiera haber algún connacional entre las víctimas", aunque frente a los antecedentes registrados "es muy probable que haya otros migrantes y se repita la historia de San Fernando de 2010".
El Salvador enviará una nota diplomática el Gobierno de Calderón en la que solicitará formalmente acceso a las muestras genéticas y huellas dactilares de los cadáveres que han aparecido hasta el momento, a fin de colaborar en la identificación de los cuerpos.
Las autoridades hondureñas, por su parte, se han puesto en contacto con el Gobierno de Calderón, pero "hasta el momento no existen indicios concretos de que haya algún connacional", ha confirmado el embajador de ese país en México, José Mariano Castillo Mercado.
A lo ocurrido en Tamaulipas se suma el hallazgo de 13 cuerpos dentro de una fosa común en el estado mexicano de Sinaloa (noroeste), según ha confirmado la Procuraduría General de Justicia del Estado. Esta fosa se sitúa en el barrio Plan de San Luis, del municipio de Los Mochis.
De abril a septiembre del año pasado, un total de 11.333 migrantes fueron secuestrados en varios estados de México, según cifras divulgadas el pasado febrero por la estatal Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). Muchos de ellos sufrieron diversos agravios como maltrato, tortura, violación sexual y, en casos extremos, fueron asesinados.