Actualizado 11/09/2015 19:47

Miles de venezolanos hacen cola en la frontera para intentar regresar a su país

   BOGOTÁ, 11 Sep. (Notimérica) -

   Desde que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, decidiera cerrar la frontera entre Venezuela y Colombia el pasado 22 de agosto tras un enfrentamiento de contrabandistas con militares, son miles los ciudadanos colombianos que han tenido que salir de Venezuela, así como los venezolanos que salieron del país vecino. Sin embargo, aún hoy, cientos de personas de ambos países esperan cruzar la frontera para volver a su tierra patria.

   Miles de venezolanos que por distintos motivos se encontraban en Colombia el día en el que Maduro anunciase el cierre de frontera, deben soportar largas filas bajo el sol en La Parada, lugar que ha sido testigo del desfile de personas cargando con sus pertenencias y familias para tratar de regresar a su país.

   Tanto niños como adultos y ancianos llegan hasta el punto de control, en este caso, colombiano, con la esperanza de que se autorice desde el país bolivariano el ingreso a su tierra. Tal y como relata el diario colombiano 'La Opinión', los ciudadanos, pacientes, esperan que ambos gobiernos lleguen a un punto en común en el diálogo de la conciliación, para que así la tensión que se vive desde hace casi tres semanas descienda y se pueda volver a una situación normal, dentro de lo que cabe.

   REFUGIADOS COLOMBIANOS RECIBEN TRABAJO

   Por la otra parte afectada, desde el punto de control venezolano, también son miles los refugiados colombianos que siguen haciendo el camino, en ocasiones obligados, para regresar a su país. Según datos ofrecidos el pasado miércoles por la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), más de 20.000 colombianos salieron del país vecino desde el pasado 22 de agosto. De esta cifra, 1.467 fueron expulsados, mientras que el resto abandonaron Venezuela voluntariamente debido a la crisis fronteriza.

   Es por esto que el Departamento para la Prosperidad, el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), Comfaoriente y el Gobierno colombiano se han unido para dar apoyo a todas las personas refugiadas que sufren la decisión del presidente Maduro de sacar a los colombianos de su país.

   Los deportados se inscribieron en bolsas de empleo que hay en Cúcuta para poder recibir un trabajo de al menos cuatro meses de duración y así soportar la situación que viven. Algunos de los refugiados colombianos comenzarán a trabajar el lunes, mientras que otros recibirán un subsidio de 200.000 pesos (unos 65,80 dólares) durante tres meses para que puedan estudiar.

   Por otro lado, los inscritos en Comfaoriente viajarán este viernes a los respectivos municipios para comenzar a recoger las cosechas de café. "Lo mejor de este proyecto es que no se van solos, sino con su familia", dijo la directora del Departamento para la Prosperidad Social (DPS), Tatyana Orozco, según recoge 'La Opinión'.

   El ministro de Trabajo de Colombia, Luis Eduardo Garzón, acudió a Cúcuta para verificar el proceso que se hace con las personas que empiezan a trabajar, recalcando que hay casi 800 personas asignadas a una labor, pero que también se piensa en ayudar a los habitantes de la frontera. Durante la visita, en la que estuvo acompañado por los directores nacionales del Sena, Alfonso Prada, y del DPS.

   ACERCAMIENTO DE POSTURAS

   Los presidentes de Colombia y Venezuela, Juan Manuel Santos y Nicolás Maduro, han aceptado la invitación al diálogo de las organizaciones regionales y han fijado para el próximo sábado una reunión en Ecuador entre las ministras de Exteriores para tratar de resolver la crisis fronteriza.

   El ministro de Exteriores ecuatoriano, Ricardo Patiño, anunció este jueves ante los medios que Santos y Maduro han aceptado la invitación de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) para iniciar un diálogo.