BUENOS AIRES, 10 May. (Notimérica) -
Kosaka Kumiko, la religiosa japonesa imputada en Argentina por encubrir y facilitar diversos casos de abusos sexuales y violaciones a menores de edad con discapacidades auditivas del Instituto Próvolo de Mendoza, declaró por segunda vez ser inocente este martes.
Presa en el penal de mujeres de Aguas de las Avispas, en el municipio mendocino de Cacheuta, Kumiko fue presentada sin hábitos y esposada frente a las autoridades judiciales para aclarar su participación en los hechos acontecidos. A su llegada a las instalaciones, la monja recibió múltiples gritos y abucheos en su contra por los presentes.
Según recoge el diario argentino 'La Nación', Kumiko dijo que las acusaciones son falsas y que los niños "mienten, es todo fantasía". En comparecencia ante los tribunales, la religiosa indicó que "jamás pudo haber cometido" los "aberrantes" actos de los que se la acusa, sosteniendo nuevamente que desconoce las inculpaciones que se le otorgan.
"Se cansó de decir que esto es imposible, que los niños mienten, que son todas fantasías, que no puede suceder algo así. Sin embargo, todos los testimonios son creíbles", afirmó el abogado de las víctimas, Oscar Barrera, según informa el medio argentino.
Además de Kumiko --que por el momento permanece en prisión preventiva--, permanecen detenidos los curas Nicola Carradi y Horacio Corbacho, así como uno de sus empleados, José Luis Ojeada.
Junto a ellos, el monaguillo Jorge Bordón y el jardinero del instituto de las víctimas, Armando Gómez, están retenidos en el penal provincial de Boulogne Sur Mer y a la espera de una resolución sobre su caso.
Asimismo, se espera poder identificar a las tres personas participantes en los abusos señaladas por las víctimas el pasado mes, cuando estos realizaron sus últimas declaraciones.