ROMA, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
El exnuncio apostólico en República Dominicana Jozef Wesolowski, imputado por posesión de pornografía y abuso sexual de menores, ha fallecido este viernes en su casa, a los 66 años, por causas naturales, según ha informado la Santa Sede.
La autoridad vaticana ha intervenido inmediatamente para llevar a cabo las investigaciones iniciales. Seguidamente, el promotor de Justicia ha ordenado practicar una autopsia que se realizará este mismo viernes y cuyos resultados se comunicarán tan pronto como sea posible. El Papa Francisco ha sido informado sobre el suceso.
El pasado 11 de julio, el tribunal vaticano encargado de juzgar a Wesolowski por posesión de pornografía y abuso de menores tuvo que aplazar la sesión inicial del juicio porque el acusado fue ingresado en cuidados intensivos de un hospital de Roma.
Wesolowski fue detenido el pasado mes de septiembre, acusado de varios delitos cometidos tanto durante su estancia en Roma desde agosto de 2013 hasta el momento de su arresto (el 22 de septiembre de 2014), como en el período transcurrido en la República Dominicana, durante los cinco años en que desempeñó el cargo de nuncio apostólico (el 24 de enero de 2008 fue nombrado nuncio en la República Dominicana y delegado apostólico en Puerto Rico, cargos de los que dimitió el 2 de agosto de 2013).
Respecto al periodo transcurrido en Roma, se le imputaba un delito de posesión de material pornográfico pederasta, introducido en la Ley n. VIII del 2013 del Papa Francisco. Para el período precedente, las acusaciones se basaban en el material probatorio transmitido por la autoridad judicial de Santo Domingo sobre los abusos de menores.
En este sentido, el Vaticano calificó el proceso de "delicado y articulado" y mostró la intención de todas las partes interesadas en el juicio de "efectuar las pruebas y análisis más escrupulosos".
DESTITUIDO POR EL VATICANO EN 2013.
El Vaticano destituyó a Wesolowski de su cargo a finales de agosto del año 2013 y abrió una investigación, después de que el arzobispo de Santo Domingo, el cardenal Nicolás López Rodríguez, informara al Papa Francisco de las acusaciones que recaían sobre el nuncio, quien fue condenado y expulsado del sacerdocio en un proceso canónico en primera instancia instruido por la Congregación para la Doctrina de la Fe.
En su ordenador de la nunciatura de la República Dominicana se encontraron más de 100.000 archivos con imágenes pornográficas y vídeos, divididos en 4 volúmenes con unos 130 vídeos y más de 86.000 fotografías con contenido sexual de menores explícito a los cuales se añadirían otras 45.000 imágenes que habrían sido canceladas.