CIUDAD DE MÉXICO, 4 Jun. (Notimérica)
Durante la primera mitad del siglo pasado dos mujeres fueron las fundadoras y dominadoras del mundo del narcotráfico en México. Una era la encargada de implementar acciones y estrategias que actualmente siguen usando los grandes cárteles de la droga. Y la otra fue la primera en infiltrar a los cuerpos de inteligencia en el país para corromperlos.
Se trata de Ignacia Jasso, "La Nacha", y María Dolores Estévez Zulueta, "La Chata". Dos mujeres que fueron capaces de establecer las bases para un negocio que mueve 844 millones de dinero ilícito que al año al año en México, según la Global Financial Integrity a 2013, y que representa entre 2 y 3% del Producto Interno Bruto (PIB).
"La Nacha" fue la "primer narcotraficante" en exportar droga a gran escala y en establecer dentro de su organización criminal una estructura familiar que en la actualidad siguen manteniendo importantes grupos como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Los Arellano Félix y Los Beltrán Leyva, entre otros.
Del mismo modo, esta se convirtió en el primer narco, de cualquier género, en controlar el trasiego de drogas en un paso fronterizo.
Por su parte, "La Chata" fue la pionera en infiltrar los cuerpos de inteligencia en México para sobornarlos y corromperlos, una muestra son sus siete ingresos y salidas de distintas prisiones en las que sólo cumplía pequeñas sentencias.
Hasta ahora, "La Chata" ha sido el único criminal declarado enemigo público número uno por un decreto del presidente de México en aquel momento.
"LA NACHA"
Esta narcotraficante creó el primer cártel transnacional mexicano. Ella es quien concretó las primeras rutas de abastecimiento hacia Estados Unidos, de las que se servirían el Cártel del Pacífico, el Cártel de Juárez y el Cártel de Sinaloa; estos dos últimos siguen operando, señaló a 'Infobae' el escritot Alejandro Páez Varela.
Era esposa de Pablo González, "El Pablote". Los dos empezaron a controlar el tráfico de marihuana y morfina en la zona fronteriza de El Paso, Texas, y Ciudad Juárez, en Chihuahua México, en los años veinte del siglo pasado.
"LA CHATA"
Gracias a su matrimonio con el expolicia y narcotraficante Enrije Jaramillo, "la chata" llegó a infiltrarse hasta la policía secreta de México.
A esta se le atribuye la capacidad de infiltración del narco en los cuerpos de seguridad del país azteca. Su fama se disparó en 1945 cuando el entonces presidente Manuel Ávila Camacho, publicó un decreto para declararla como enemigo público número uno, como una medida del gobierno para detener la infiltración del narco en sus organismos de inteligencia.